Quiero estar contigo, que me hagas el amor suavemente, aspirando mi aroma, memorizando cada gemido, rozándome apenas con tu aliento, quiero que en
un abrazo detengas el tiempo, para poder darte el alma en un beso, que saborees
mis fluidos y el sudor de mi piel para fundirme junto a ti, para beber el olor característico que desprendes al penetrarme, al hacerme tuya pausadamente una
y otra vez de forma casi religiosa.
Quiero que me hagas el amor, sin prisas, descubriéndonos mutuamente, grabando
cada detalle que rozan tus dedos, tus labios, renaciendo junto a ti, frágil, excitada,
tuya eternamente, galopando intensamente para encontrarnos en las puertas del
clímax, perteneciéndonos en alma y cuerpo, buscando el aire inexistente dentro de nuestro pecho, llorando, riendo, gritando nuestro nombre para no olvidarlo en esta pequeña muerte que experimentamos al llegar.
Quiero que me hagas el amor otra vez...
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