Nadie más que tú y yo
fuimos bastardos ayer
amantes famélicos
válvulas de escape
Tú eras una perra perpleja
y yo un león paranormal
muerto de frío
con costras de moscas
en los ojos.
No nos amamos nunca
pasábamos desnudos
jugando a dormir solos
tu llorando escondida
yo como sin rostro
aburrido de verte molida
por el volumen de un soplo
Éramos una rumba de rocas feas
en un camino tramposo
Texto agregado el 03-10-2009, y leído por 215
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Lectores Opinan
14-11-2009
La impronta de tus versos me regala el olor de los árboles y la imagen de la tierra de nuestra zona. No puedo imaginar tus letras sin ese aire que aturde y se ha quedado en el alma y se sale en tus versos. Bello texto, doloroso, inmenso. Estrellas vienen volando. FaTaMoRgAnA