Encuentro con el diablo

Me encontraba caminado por las calles oscuras de mi barrio,, honestamente iba algo tomado, acababa de salir de un bar, después de un par de tragos me despedi de mis cuates y emprendi la dichosa caminera.

Pasando por un callejón silencioso y oscuro una voz interrumpio el silencio – dame unas monedas ayudame. – observe a todos y no vi algo hasta que mire al ras del suelo y vi un sujeto tirado en el suele, un pobre diablo, un borracho.

– Unas monedas ¡ja! Maldito huevon – lo reprendí. – por favor – Continuo suplicando, lo observe con detenimiento y de repente oi un ruido a mis espaldas.

– Ya se los cargo hijos de la chingada – dijo una voz a mis espaldas, yo voltee y observe un sujeto con una capa negra, observando hacia abajo, observe por unos instantes y ambos nos dimos cuenta que era el mismo diablo, no creiamos lo que veiamos.

–Esto no es posible– dijo el borracho mientras hacia un esfuerzo por pararse y correr.

– ¿Qué intentas? ¿Correr acaso? Eso no te va a ayudar – le dijo al borracho señalandalo.

– Y tu maldito avaro, no vas a dar ni un paso te lo aseguro, al se el ser mas malvado y poderoso de este mundo sus esfuerzos no sirven de nada, además aquí ya valieron par de cabrones – dijo el diablo con voz maliciosa mientras nos señalaba.

Comenzamos a suplicar piedad. – tu maldito avaro borracho, y tu maldito huevon drogado, no creen que ya fueron muchas, ¡ahora si las pagan cabrones! – dijo el dialblo.

Después de darnos su discurso, tomamos valor y nos dirigimos hacia el, comenzamos a golpearlo pero fue inútil, en cambio, el de un solo golpe nos tumbo.

Durante esos instantes perdimos la conciencia unos instante, cuando despertamos, el demonio ya no estaba, pero había un papel tirado ahí en el suelo, era una carta, la tome y comenze a leer en vos alta, decia: “ustedes par de malditos, ya no tienen solucion, algún dia par de cabrones vendre por ustedes, solo tienen una oportunidad mas, si no es así probaran el infierno”

Algunas semanas después, en un acto de regeneracion, habiamos cambiado totalmente nuestras vidas, yo había dejado de tomar y deje de ser avaro, le daba mi dinero a los necesitados; el drogado, era una persona que poseia un trabajo, se había alejado de las drogas, era mas recto que yo.

Aun seguimos esperando el dia en el que nos lleve el diablo, pero ese dia no ha llegado, espero que nunca nos llegue ese dia.