17 de Setiembre de 2009.

Energía, Materia oscura y Ondas gravitacionales.

Estamos en un Universo, en el que sin saber a ciencia cierta el papel que desempeñamos, podemos interactuar con él, a través de nuestros Sentidos.
Cuando una persona queda en estado vegetativo, por haberse cortado su médula en el enganche con el cerebro, los médicos, luego de muchos análisis e intentos, optan por terminar con su vida, ya que ha pasado a ser materia inerte, al no poder comunicarse ni atender el mantenimiento de su cuerpo.
La acción de quitarle la asistencia para la vida, al desconectarle las máquinas, lo hace perecer en pocas horas, dejando libre su administrador de funciones, que pasa a integrarse a la fuente, o marcha a lugares desconocidos.
La energía en forma de biomasa, queda tirada inerte, a la espera de ser incinerada o enterrada según los deseos del occiso a su tiempo.
Es materia que debe ser desechada lo antes posible, pues se descompone rápidamente y comienza a heder.
La forma en que podemos conocer el Universo accesible, es mediante la luz.
Ya sea emitida, reflejada, rechazada o absorbida.
Las Ondas electromagnéticas, nos traen noticias de que existen objetos lejanos y muy lejanos que hace muchos millones de años, estaban ubicados en el lugar en que los vemos hoy.
No nos es posible ver los conglomerados materiales que pueblan el Cosmos, en tiempo real, por lo que debemos conformarnos con un puzzle que está compuesto por objetos reales, pero conforma un panorama virtual, donde los tiempos de cada uno, son independientes de los demás.
Dios no nos permite apreciar la creación como un todo, sino como un conjunto que llega a nosotros simultáneamente, de objetos que existen, otros que han desaparecido mucho antes de que se creara el sistema Solar, y otros tan lejanos que se alejan a velocidades increíbles, y pronto abandonarán el campo óptico, convirtiéndose en energía, al sobrepasar la velocidad de la Luz.
Este Universo es totalmente Energético: todo lo que vemos y detectamos es Energía, ya sea en forma de Ondas Electromagnéticas o Materia.
Las principales mensajeras del Cosmos son las ondas electromagnéticas, y la Materia es el escombro que ha quedado luego de la gran explosión.
El detrito que denominamos Materia, es la Energía que se ha aglomerado en concentraciones estables en períodos de tiempo que nos permiten observarlas.
Las ondas electromagnéticas, son también portadoras de energía, y son emitidas por poderosas fuentes energéticas quizás como mensajes de que allí se encuentran.
Así las cosas, todo lo que circula por este inmenso universo es energía en todas sus formas y estados posibles o conocidos.
El espacio y el tiempo son consecuencias de la separación de los conglomerados materiales, producto de la expansión de la Energía.
Pero existe una forma de Energía, que también ocupa los lugares que consideramos vacíos, y que superabunda en los estratos intergalácticos: las Ondas Gravitacionales.
Ésta es sólo detectable, por los efectos que produce en el movimiento de los conglomerados materiales que conforman las Galaxias y los cúmulos, que son las mayores referencias materiales del Cosmos visible.
Aunque interfiere en la dirección de la Luz y las ondas electromagnéticas, curvando el Espacio, no las afecta en su naturaleza ni las destruye.
Esta manifestación de dimensiones vecinas, que invade los espacios intergalácticos, justifica la idea de un Multiverso, compuesto por varias dimensiones, cada una de las cuales constituye un Universo semejante al nuestro en tamaño, de características posiblemente muy diferentes, pero que tienen en común o comparten las mismas ondas gravitacionales.
Esta forma de energía supera ampliamente a toda la materia y los fenómenos energéticos sumados, de este Universo.
A esta Energía Oscura, se la ha denominado materia oscura, porque el hombre siempre busca energía en forma de materia, y al no hallarla, supone que es invisible como el polvo de las nebulosas oscuras, o algo desconocido que superabunda pero es indetectable.
Esta prueba de vínculo interdimensional, jamás sería aceptada por los científicos, porque precisamente, no puede ser probado.
Filosóficamente es como Dios, cuya existencia es negada, porque no puede ser probada, aunque muchos hayan tenido la agradable experiencia de ser curados, salvados, o haber prosperado, por una asistencia que pocos reconocemos y aceptamos.
La influencia exógena entre las dimensiones, ha tratado de ser explicada por eminentes científicos, tales como Carl Sagan, Stephen Hawking y otros, como justificación para el fundamento de la Teoría Cuántica: hacen falta más dimensiones para explicar los fenómenos en el ámbito de las micropartículas y los componentes minúsculos del submundo cuántico.
Estos mini componentes son también energía pura, y por sumatoria se convierten en otros mayores, hasta llegar a la materia misma.
Yo pienso y me conmuevo ante la incredulidad de los científicos y matemáticos que basan todas sus conclusiones en análisis numéricos, basados en una ciencia que parte de axiomas y supuestos que se dan por sentados sin poder ser demostrados. Las definiciones iniciales o las piedras fundamentales del edificio matemático, se basan en algoritmos formados por axiomas, postulados, y conceptos indemostrables. Algo así como: supongamos que..., o había una vez... El basamento axiomático de una ciencia que pretende ser exacta, le quita fundamento en una retrospectiva profunda.
Los teoremas primarios se apoyan en condiciones necesarias y suficientes de los postulados, que no escondan contradicciones, para que el sistema sea compatible, ‘¿?.
Tal vez la incertidumbre final de las grandes Teorías matemáticas y los modelos numéricos se deba a sus débiles cimientos.
Un análisis un poco más profundo del edificio matemático, nos lleva a descubrir que está siendo carcomido por aluminosis basal.
Las últimas ciencias, que han traído más conocimiento y educación a las Masas, se basan en sistemas binarios, a partir de los cuales se construyen algoritmos que son infalibles, si se siguen al pie de la letra.
Si bien las grandes teorías de la ciencia, nos han llevado a un progreso que está a la vista, no nos han permitido acercarnos a la Creación en un gesto de reconocimiento y reverencia, para agradecer las Autorizaciones que nos han llevado al descubrimiento y el invento.
Vayamos más lejos aún: antes del Big Bang, el Universo era un punto energético, contenido por la gravitación, podríamos aseverar que era sólo energía en forma de gravitación.
Hay una tendencia a asemejar la gravitación a la gravedad, pero son dos cosas totalmente diferentes; la gravitación existe en todo el Universo, y es una de las formas que toma la Energía.
La gravedad, es una fuerza que surge por sumatoria de los conglomerados materiales que actúa por proximidad a los objetos, teniendo un valor proporcional a la masa e inversamente proporcional a la distancia al cuerpo, pero no trasciende las dimensiones, como la gravitación, sino que opera en este universo y entre los cuerpos materiales que lo componen, afectando también la trayectoria de las ondas electromagnéticas.
El cerote gravitacional primigenio colapsó, dando lugar al surgimiento de la energía, que luego de cierto lapso se diluyó en su expansión, dejando una escoria que constituyó lo que hoy denominamos materia, su separación creó el espacio y el tiempo.
Partiendo de este axioma, podríamos llegar a deducir que las ondas gravitacionales que afectan hoy los conglomerados galácticos, cúmulos y súper
cúmulos son parte de aquella primera bola que explotó, pero si aquella gravitación primigenia, se convirtió en energía, y luego parte de esta en materia, es poco probable que se trate de las mismas ondas gravitacionales.
Podríamos sí pensar que todos los universos o dimensiones surgen a partir de las ondas gravitacionales, y esa hipótesis le daría sustento a la idea de que pueden pasar de dimensión en dimensión interactuando en todas las que abarquen.
Estas reflexiones, no dejan de lado para nada, el reconocimiento de que detrás de toda esta creación, hay un Pensamiento dinámico, organizador, ordenador y vigilante de su Obra.
Puede asignársele el nombre que cada cual quiera, pero en todos los casos es el mismo dueño el que manda en estos dominios.
Las Religiones lo reconocen, y aunque muchos científicos lo nieguen, y otros miran para otro lado para no quedar en ridículo ante sus pares, la imponente Creación habla por sí sola del Divino respaldo.
Energía, materia oscura y ondas gravitacionales, un tema que da para mucho más que tres páginas, puede condensarse a este comentario.
Legos y profanos somos todos los que queremos comprender a Dios en sus motivaciones; hasta los propios científicos deben reverenciarlo, por haber sido dotados de sus privilegiados cerebros.
Ellos están en mejor condición intelectual, como para cambiar los caminos de enfoque hacia lo trascendente y el conocimiento profundo.
La Sabiduría es una Virtud que concede la Entidad a aquellos que le temen y lo aman.
Tal vez algo incomprensible para los hombres de ciencia.
Pero una cosa muy simple para aquellos que en tren de subsistir, deben emplearla para lograr un lugar digno entre los demás integrantes de las sociedades modernas.
Dios provee, cura y da prosperidad a quienes logren descubrirlo en las pequeñas cosas de la naturaleza.
Tal vez no lo encuentres entre el mar de galaxias que pueblan el Cosmos, pero podrías, pero podrías hallarlo en las pequeñas flores que estás pisando.

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