-… ¿Quién soy?... -.
Explicación:
Este cuento trata de la ignorancia que existe en todo ser humano sobre su verdadero origen y destino. El ser humano en esta etapa vive anclado en el mundo físico. La sociedad, la cultura, la religión, y todo el entorno del individuo, le proporciona dogmas que lo encarcelan impidiéndole buscar una explicación de su verdadero Ser. La mayoría de las religiones de occidente dicen que la base es creer sin preguntar el por qué, a sabiendas de que la duda es la llave que abre las puertas al conocimiento dormido. La mayoría de las personas siguen desde pequeños la tradición de llenar su mente de todo lo que les enseñan, hasta que poco a poco se van cansando de escuchar lo mismo, y empiezan a pensar que eso ya no les satisface, y la duda empieza a brotar en su interior. Surgen entonces, como luces en la oscuridad, las preguntas más apremiantes de su existencia real: ¿Quién soy?, ¿De dónde vengo? y ¿A dónde voy? Es la primera de ellas, la que desencadena las demás preguntas. De aquí, la importancia que el autor le brinda al describirla solitaria en este cuento; pues sabe, que todo aquél que se la cuestiona, tarde que temprano le lloverán como rocío las otras.
La mayor parte de su vida, el hombre ignora las respuestas a estas preguntas; es más, ni siquiera se he percatado de la existencia de estas preguntas. Su mente está totalmente llena de las cosas materiales con las que trata de subsistir en este mundo. No hay espacio ni tiempo para reflexionar sobre lo que existe más allá de la mente consciente y subconsciente, más allá del cuerpo físico y de este plano físico. De aquí que las personas que dudan y se preguntan ¿Quién soy en este mundo inmenso?, es porque en su interior ya no fue posible subsistir con los dogmas tradicionales que las religiones y la sociedad nos da. Es necesario ir más allá.
Aquél que se inicia en los cuestionamientos de este tipo, es porque ha descubierto un pequeño hueco por donde se escapa un destello de Luz de su interior. De él depende continuar quitando las capas que recubren esa Luz. Puede, que con el tiempo, sin darse cuenta vuelva a ocultar ese destello de Luz. Pero la semilla ya ha sido sembrada, y tarde que temprano germinará.
A pesar de hacerse estos cuestionamientos, la persona sigue siendo un ignorante de las verdades que esconden estas preguntas, pero a diferencia del resto de las, él es un ignorante consciente de que no sabe, y eso lo convierte en un buscador. Y el que busca, tarde o temprano, encontrará.
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