| Estoy muy nerviosa, de aquì no puedo salir, el ambiente esta hecho para ver estrellas; te tengo acá a mi lado, dispuesta a desnudarme para ti. Esto no es sueño, es una realidad y  no puedo calmar  mi corazòn que esta muy agitado, es como si supiera que tendrà que trabajar a todo motor.
 Siento la ducha correr y su voz que me llama, me invita a acercarme, desvestirme, a mostrarme tal como soy, sin ropajes que cubran mis debilidades.  Me acerco a èl, comienzo a sentir sus caricias, lo miro a los ojos,  no emito ningùn sonido, estoy hechizada.
 
 Entre el agua, jabon y caricias, lo beso suave, delicadamente, sintiendo su calor, su vida.  Decido  entonces soltarme para vivir el viaje del placer.
 
 Terminado este baño de encantos, me lleva al dormitorio y llegamos a la cama, es una maravilla tenerlo acostado, con todas sus partes hechas fuego, todas para mì ¿ no serà demasiada emociòn?. Lo beso, acariciio, lo mimo y me pongo en posición para recibir ese òrgano que esta firme y con suaves ritmos comienzo a ver lo magia,  a gemir...a creer que, ¡ esto si que es vida, pura humanidad!
 
 Tres horas nos bastò para encariñarnos, prometernos amistad con ventaja,  a tener un interès comun, que es el viaje que tuvimos a la inmensa ciiudad de la alegrìa,  de sentirnos libre, sin ningun paradigma que detenga nuestro vuelo e imaginaciòn...
 |