Arriba del huracán una estrella se avecina, la observo como quien tañe con nostalgia una canción casi olvidada.
Todo huele a perfume encantado, triturado y mezclado con azahares para confundir enamorados.
Todo matiza a somnolencia, a espacios infinitos sin perspectivas, simulando un sistema de frases, puntos y aplausos que se descorren al tiempo que clavan martillos en clavos.
Gira a un costado el sonido.
Oscurece el vino gargantas que simulan roncos placeres.
El sol… tan lejos… tan tibio… cansino paseante del cosmos…
Manos encorvadas toman el líquido de mis ojos, deambulan mis habitaciones entre tanto hastío sin reserva.
No creo.
Siento.
Y no desisto a pesar de…
El rotulador de esferas se cierne sobre mí, me catapulta a un universo paralelo y…
…otra vez, escucho el ansia convertida en aves que circundan extasiadas un sinfín de colores.
Todo brota, y no solo de abajo se ejecuta el arcoíris…