Sé que esperas un señor perfecto. Pues eso ni siquiera parezco. De cuando en cuando, sin embargo, afloran algunas virtudes. La lealtad es una de ellas. También lo es el respeto. Dicen que soy presentable y llevo un caudal de experiencia. Tras trabajar mucho, demasiado, mi situación es holgada. Por eso no dejes que escape e ignora mis muchos defectos. Prometo olvidar los tuyos. Haré a un lado tus delirios. Trae sólo lo que llevas puesto y luego...inventemos el resto.
Texto agregado el 09-09-2009, y leído por 443 visitantes. (16 votos)