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NO HEMOS PUBLICADO LOS AUTORES DE ALGUNOS TEXTOS POR PROBLEMAS AGENOS A NUESTRA VOLUNTAD. LOS AUTORES FAVOR CONFIRMAR QUE ESTOS TEXTOS SON SUYOS ENVIANDO NUEVAMENTE EL TEXTO EN PRIVADO AL LIBRO DE VISITAS. GRACIAS

TEXTOS Y AUTORES

LA PENA DEL PEON[U:negroviejo]

Es triste la vida del peón, pensaba. Y si es oscuro, peor. Pero aun sabiendo que la blancura era una ventaja en este mundo discriminador, no renegaba de su color. Nadie elige su vida, sus capacidades ni su apariencia y hay que seguir adelante.

Ni lo miraba, pasaba a su lado, altiva, una verdadera reina, a veces hasta rozándolo, pero jamás le dedicaba, siquiera, una mirada conmiserativa. Para ella, él no existía. ¡Y la amaba tanto! Al punto que estaba dispuesto a dar mil veces la vida por ella. Y como si fuera poco, tenía marido.

Y no se trataba de timidez, era lo suficientemente audaz como para intentar cualquier locura, pero su condición lo limitaba. Sencillamente, no tenía acceso a su mundo. Su vida, era abnegación y sacrificio, y de alguna manera el dolor lo reconfortaba al pensar, que ella, era la destinataria de sus esfuerzos.

También se preguntaba porqué se torturaba tanto. Sus compañeros, que no la pasaban mejor que él, simplemente aceptaban su destino sin cuestionamiento alguno. Pero él, tenía la desgracia de pensar, lo que a menudo, es un serio impedimento para ser feliz.

Escuchó la voz del amo y supo que era hora de trabajar. Era un buen hombre y cuando experimentaba el contacto de su mano se sentía elegido, reconocido. Eran los cortos momentos de alegría que halagaban su ego y reafirmaban su autoestima.

Se sintió, como tantas veces, elevado por el aire dos pasos adelante, mientras escuchaba de boca de su amo la repetida frase:

Peón cuatro rey

UNA LLAMADA[U:iolanthe]

Frente al televisor aprecio un elemento común en todas las cadenas. Un ridículo personaje de cabellera azul y sonrisa histriónica. Visualizo unas siglas bordadas en su ropa: U. M. E.
Busco información del intruso en mi pc. Obtengo mil referencias.Quedo estupefacta, nos invaden desde otra dimensión los USURPADORES MOMENTOS ESTELARES.
Por eso no proyectan telediarios, concursos, documentales... El motivo de su multipresencia, captar la atención para obtener el culmen de un acto sexual humano.
¿Cómo erradicarlo? Desenchufando el aparato. Así lo hago. Suena el teléfono, esta vez un mensaje dice: I LOVE YOU, firmado U.M.E. Me humedezco. Invasión garantizada.

EL ENCIERRO [U:flop]

El centro comercial había quedado en penumbra justo cuando la puerta del ascensor se cerraba tras ella. Empezó a transpirar. Una punzada en el estómago le cortaba la respiración.
Su antiguo pánico a los encierros se hacia insoportable en la oscuridad. Sus piernas se aflojaron. Un aire helado le rozó la cara... y la mano de su amiga apretó la suya con fuerza. Estaba muy fría. Trató de hablarle pero no pudo. Seguía aterrada.
La mano fría se fue entibiando con la suya. Respiró aliviada. ¡Gracias al Cielo que habían quedado juntas!
De pronto se oyó por los parlantes:
“Un rayo cayó en la instalación eléctrica. Pero ya está todo controlado. En segundos se repondrá la luz. Conserven la calma”.
La mano amiga se apartó bruscamente. Otra vez el viento helado le rozó la cara... Y extrañada escuchó una voz muy suave que decía:
- Gracias, siempre había soñado con conocer a una amiga en un paseo de compras.
Volvió la luz y la puerta se abrió.
-¡Por Dios! Mujer, dime algo. No sabes el susto que he pasado pensando que te habías desmayado sola ahí dentro y yo aquí fuera sin poder hacer nada. Dijo su amiga totalmente consternada.

Los martes[U:lulita_64]

Observaba su cuello, con deseo, con ansias de algún día recorrerlo; hoy lo tuve (con un poco de imaginación lo beso, lo acaricio, lo muerdo...) y mis manos no encuentran fronteras dentro de su cuerpo. Loca, loca estoy por verlo de nuevo, y por repetir lo que veo en sueños. No, no me basta una vez por semana, a un horario pactado, con su cuerpo desnudo, medio tapado. No, no me basta con mi delantal puesto, con sus ojos cerrados, con los míos abiertos. No, no me alcanza con su cuerpo aceitado, con mis manos ardientes, y su ropa a un costado.
No, no me basta con ser sólo su masajista.

Un caso de suicidio[U:sigfrido]

Pues un día, cuando estaba casi por caer la tarde, me dijo el sargento que estaba a la par de nuestro jefe, que desde este momento, me convertiría en el perseguidor de un delito, que les parecía a ellos que no era, lo curioso es, que después de ser, durante muchos años, un simple agente sopla pitos me iba a convertir en investigador.
Con el Ego inflado y la pechera salida me dispuse a preguntar qué era eso que tenía que investigar...
¡Tienes que solucionar un caso de suicidio! Me quede helado, ¿Cómo es eso de solucionar un caso de suicidio? Pregunte un poco asustado, ¡Pues nada! Solo que alguien murió y tú tienes que encontrar al asesino...
Fue entonces que baje la vista hacia mi pistolera y la vi vacía... Me vi la mano y vi en ella el revólver humeante... sentí la sangre correr por mi mejilla... me vi la vista y me encontré, con que ya sabía quién era el asesino...
Caso cerrado y resuelto.

Sube la marea[U:zumm]

Estuvimos callados, sin hablarnos por más de una hora. Ella estaba acostada boca abajo sobre su toalla y cada cinco minutos cambiaba de posición para broncearse en forma pareja. La miraba de reojo y admiraba su cuerpo perfecto que nunca me cansaba de desear.
Me puse de pie. — Voy correr—le dije. Llevábamos saliendo todo el verano y no había día en que no peleáramos. Mis terribles celos y su personalidad excesivamente simpática y cordial, especialmente con el sexo masculino, me alteraban sobremanera. Desde que era un niño he resuelto mis problemas, corriendo. Corriendo hasta caer extenuado. Con este agotamiento físico que siento mientras corro, logro evadirme del mundo y borro de mi mente las molestias.
El caso es que estaba corriendo por la orilla del mar, en dirección al faro mientras pensaba en el sentido de nuestra relación. En estas últimas semanas, las discusiones eran tan frecuentes, que varias veces pensé en dejarlo todo. Sin embargo, teníamos tan buenos momentos.
La playa era inmensa y hasta el faro, habría unos tres kilómetros que me dejaron agotado. Me tiré en la arena a descansar, mientras veía como lentamente subía la marea y el mar jugaba con mis pies.
Ahora estaba yo, completamente calmado, mientras meditaba sobre el ridículo motivo de la discusión de hoy. Decidí volver y pedirle perdón. Trataría de no ser tan celoso y dejaría de desconfiar de sus ojos que cuando miraban a otro hombre, me parecían insinuantes y acariciadores.
Cuando llegué al lugar donde la había dejado, ella ya no estaba, pero allí estaba mi toalla y mi bolsa totalmente empapadas por la marea que había subido. En ese momento vi todo rojo y decidí dejarla. Ascendí las escaleras dejando esa historia, allí, en la playa. Pero esta vez no corrí. Creo que arrastraba los pies.

El idiota salió a correr como siempre que tenía algún problema. No sabía discutir y por eso siempre callaba o salía corriendo. Eso hizo también aquella tarde. Me dejó sola, tumbada al sol. Estuve allí, disfrutando del sol, cuando empecé a sentir que se humedecía la toalla.
La marea estaba subiendo y las pequeñas olas prácticamente ya alcanzaban nuestras toallas. Recogí todas mis cosas y me fui hasta el quiosco situado a pocos metros, sobre el paseo marítimo. No sé porqué no quise levantar lo suyo. Una vez allí, pedí una cerveza. Un muchacho de cuerpo enteramente bronceado se acercó a mí y me pidió fuego.
Estuvimos hablando de mil tonterías por más de una hora. Finalmente me despedí de él y me dirigí hacia las toallas. No encontré nada.
Busqué en todas direcciones y no le encontré nunca más.


El Calor de la Horca[U:olavera]


El Sol caía implacable sobre el pequeño poblado, ni una nube en el cielo, ni un soplo de aire, un perro dormitando en una sombra y.. , silencio, solo calor y silencio, la calle vacía, las casas de madera parece por momentos que fueran a empezar a arder, el fondo de la calle se desdibuja por las emanaciones del calor del suelo, haciendo temblar las siluetas de las ultimas casas.

Entre aquel espejismo se fue perfilando la comitiva, seis hombres armados con rifles, el gesto serio, sucios, empapados en sudor; en medio y por delante, delatado por la estrella del pecho, el Sheriff, y a su lado fuertemente atado, con las manos en la espalda, un hombre acabado, el rostro invadido por el miedo, el sudor deslizándose por las mejillas y el paso vacilante; detrás de todos, un grupo informe de hombres, mujeres y algunos niños, todos en silencio, caminando y levantando el denso polvo de la calle.

Su destino..., la horca, una sucia cuerda, que cuelga del único árbol que tiene el inhóspito pueblo, no se mueve, espera impávida a su víctima, no hace aire, solo calor, mucho calor.

La comitiva llega a su destino, frente a la horca, el pobre diablo respira trabajosamente, una gota de sudor se desliza renqueante a lo largo de su nariz quedando colgada de la punta, todos miran, el reo sacude la cabeza, la soga espera, una nueva gota ocupa el lugar de la anterior, el reo se sacude, la tensión se masca.

De repente se vuelve hacia el Sheriff, y con una energía que parecía perdida le grita.

-¡JODEEER NO AGUANTO MAS!, rascame la nariz, yo así no sigo, a mí o me soltáis las manos, o me vais secando el sudor...

- - ¡COOORTEN!, ¿QUÉ COJONES PASA AHORA?, ¿PERO ES QUE NO VAMOS A TERMINAR NUNCA?

-...o rodamos la escena en Diciembre, yo soy un profesional, ¡un actor!, no una mula de carga y que yo sepa el contrato no dice nada de...

Los ojos de la araña [U:gmmagdalena]

“La araña salió por mi párpado izquierdo y estiró sus largas y velludas patas por mis hundidas mejillas. A través de uno de sus ocho ojos, pude ver el montículo distorsionado sobre el que se deslizaba indecisa sobre si saltar en busca de una nueva presa o permanecer picoteándome el cerebro.

De las oscuras paredes que me aprisionaban, brotaron miles de cucarachas que se introdujeron por cada poro de mi cuerpo que aún no estaba ocupado y un pútrido aroma de cadáver ingresó por mis fosas nasales indicándome que estaba fatalmente muerto.

Acomodé mis huesos y mi carne putrefacta sobre ellos, abrí el sepulcro y salí a saciar mi sed de vida”.
......................................................... ................................... ...
Displicente, el psiquiatra tomaba notas en una pequeña libretita. Hacía más de una hora que ese pobre hombre divagaba siempre sobre lo mismo y él estaba harto de escucharlo.

Se levantó del sillón entumecido por la rígida y profesional posición; encendió su pipa y mientras miraba por la ventana, lo instó a continuar con su relato. Sabía que este tipo de pacientes gustaba de explayarse en sus delirios y él, aunque indiferente, les hacía creer que los escuchaba, mientras en realidad estaba pensando en su joven y bella esposa.

........................................................ ................................ ...................
La araña de ocho ojos atisbó la nueva presa y saltó sobre su cuello devorando en un instante su garganta, la víctima no había alcanzado ni siquiera a sospechar el ataque, el cuerpo cayó sobre sus propios flujos sanguinolentos y la araña fue ingiriéndolo lentamente, hasta dejar sólo los huesos. Luego extendió sus velludas patas cubriendo los restos y les insufló nueva vida.
.......................................................... ................................... ................

El psiquiatra se encaminó hasta el estacionamiento dónde dejaba su auto, atrás quedaba su secretaria asombrada ante la desaparición del paciente; él no supo explicar que había ocurrido, sólo que al girar su cabeza de la ventana, ya no lo vio más. La tranquilizó diciendo que era muy probable que se hubiese retirado en un momento de distracción de ambos, que no se preocupara demasiado, era sólo un loco más.
........................................................... .............................. ........

Mientras manejaba aflojó el nudo de su corbata, una sonrisa se dibujó en sus labios al recordar a la joven esposa que lo aguardaba; de pronto parpadeó molesto, las luces de los autos que venían por la mano contraria herían los ojos de la araña.

Ganar[U:draul]

Competir, siempre competir.
La pasión, la sangre, el orgullo; muchas veces inhibe el funcionamiento efectivo de la razón.
Allí iban ambos, compañeros de tantas aventuras.
Venían descendiendo la ladera de una montaña. La subida había sido trabajosa, pero el amor propio de ambos hizo posible conquistar la cumbre.
El descenso sería más fácil, aunque eligieron bajar por la pendiente mas pronunciada.
El camino rocoso no era sencillo. Algunas piedras caían desde algunas salientes superiores.
Sus pasos cansinos, de a poco fueron percibiendo que el otro aceleraba su andar.
No podían con su instinto eterno de querer ganar. En todo, en lo que sea.
Cargados con sus mochilas, cansados del esfuerzo desgastante que los consumía.
Aun así, sin decirlo, ya habían asumido el reto.
Un duelo sin armas, pero que sería a muerte.
Sus ojos se entrelazaron en una mirada desafiante. Ya no había vuelta atrás.
Había que llegar a la base de la montaña antes que el otro.
Los pasos presurosos, se convirtieron en trote, en corrida.
La fragilidad de las piedras, y la fuerte inclinación, era cultivo de riesgo.
El ritmo de descenso era parejo, no se sacaban ventaja. En su esfuerzo por superarse, uno de ellos cayó.
Sufrió unos raspones, nada grave, unos cuantos magullones, y el orgullo herido de ver como su amigo le sacaba doscientos metros de ventaja.
La base no estaba lejos, ya se veía ganador. Cuando levantaba sus brazos para festejar,
un grito que surgía desde el cielo, sorprende sus oídos; mucho mas a sus ojos.
Un cuerpo lanzado al vacío, acalambró cada uno de sus sentidos.
Fue un rayo fulminante, alumbrado por un sol tibio que lo atravesó, y se clavo contra una piedra negra enterrada en la naciente de la montaña.
Corrió, más de lo que podía.
Abandonó sus bolsos, que sus manos ya no podían sostener, y se acerco arrastrando las suelas, con lágrimas en los ojos.
Lo abrazó, lo aplastó contra su pecho, y abrió un papel arrugado que traía en su puño.
Incrédulo leyó ...
Te gane!

ESO ES LO QUE SE DICE...[U:rolox37]

Seis años antes, Maribel conoció a Fernando cuando realizaba el servicio social en la fábrica donde laboraba. Parecía muy lejano el día en que Claudia se lo presentó y desde entonces empezó su relación.
Claudia por su parte no tuvo objeción, ella hasta cierto punto se había cansado ya de las infidelidades de Fernando y a su vez vivía ahora un candente amorío con Alfredo, que aunque sabía que era casado y que Ivette, su esposa no ignoraba la traición de su marido, poco le importaba pues ella al mismo tiempo mantenía un romance secreto con Sebastián, el amante de ella y de Magda, la ex-esposa de Jorge y del cual se había divorciado algunos meses antes al descubrir la extraña relación que mantenía con Pedro, el amigo más cercano de Victoria, que a su vez está casada con Abelardo.
Si, ese mismo. Abelardo Rodríguez. Aquel que tiempo atrás había dado tanto de que hablar cuando su imagen falsa y prefabricada de hombre de familia se cayó a pedazos y salió a relucir que tenía una amante desde hacía casi cuatro años. Verónica, la concubina de Aurelio que aún seguía casado con Eugenia y tanto se rumoraba que tenía un hijo de Antonio, el tipo aquel que había muerto de una enfermedad que lo fue enflaqueciendo poco a poco y nunca lo pudieron curar.

Quizás por todo eso, Maribel tomó esa extraña decisión de arrojarse a las vías del tren cuando este iba pasando.
Y si, tal vez por eso fue. Porque según dicen los que estuvieron ahí ayudando a recoger los pedazos del cuerpo de esa pobre mujer, batallaron mucho para destrabar sus dedos engarrotados de una de sus manos amputadas creyendo que ese papel apretujado era su carta póstuma...Pero no, resultó que no era eso.
Resultó que era un papel roto y arrugado que con mucho esfuerzo alguien leyó y alcanzó a ver que decía: POSITIVO.

…Y ahora hasta andan inventando que muy pronto se va a llenar la vía del tren de mucha gente que va a ir a matarse ahí.

A mi no me consta nada ni sé que tan cierto sea, pero eso es lo que se dice.
Son las cosas que anda contando la gente por aquí.

El joven y el anciano.[U:estebanoz]


Un joven y un anciano compartían una amplia celda, donde los días pasaban y ninguno se hablaba.
Hasta que se toparon los dos sentados en los retretes, la incomodidad del joven era evidente y la cotidianidad del anciano también.
Luego de esa incomoda situación el joven preguntó: ¿Cómo se llama usted? Miguel respondió el anciano, con una voz carcomida por el tabaco y el paso de los años.
Don Miguel… ¿y usted tiene hijos? Se preguntaba el joven, ya que el anciano se veía triste y abandonado. Ninguno, respondió. Y ¿Por qué? Volvió a preguntar. No importaba cuanto tiempo no se hablaron el uno al otro, este era íntimo y valía por todas las conversaciones que nunca tuvieron.
El anciano en años que no hablaba con alguien y menos algo tan personal. La curiosidad del joven y su soledad le hicieron responder. No tuve hijos por mi diabetes, de joven que sufro de eso, además en mis tiempos solo las personas de grandes riquezas y buena escala social podían tener hijos, pues yo ni lo uno ni lo otro. Respondió mientras trataba de encender un cigarro.
Ahí el joven entendió el por qué de su encierro, soledad, abandono y tristeza. Mientras le ayudaba con el encendedor.
Al fin encendió el cigarro y el viejo se acostó con sus brazos en la nuca, botando una gran nube de humo.
En eso el guardia abre la celda y hace salir al joven para decirle que ha quedado en libertad.
Recoge tus cosas para que te vayas. Está bien Don… Armando, respondió el guardia.
Bien, Don Armando, me despido y salgo. Al entrar nuevamente a la celda ve a Don Miguel todavía acostado y con el cigarro ya apagado. Don Miguel había muerto pero con una sonrisa en sus labios. El joven rompió en llanto gritando: ¡Don Miguel! Mientras el cuerpo cerraba los ojos lentamente derramando unas lágrimas con las que lo desvanecían completamente, como viento que se lleva el polvo.

MENSTRUACION:
TODO ES UNA MIERDA.
[U:malenita]

Bueno sí, tenia que empezar asi, les gusto geeeenial ahora si no les gusto arriba de la pagina, al costado derecho hay un botoncito rojo con una cruz en blanco. Lo apretan y despues se van bien a la mierda.
Yo estaba feliz, contenta. Bueno feliz, feliz... estaba bien. Ahora siempre que estoy feliz algo tiene que cagar absolutamente todo.
¡HOMBRES, SI... HOMBRES!
Seré yo que no me conformaré nunca, ellos que simpre se mandan alguna cagada. No lo se, la cuestión es que no puedo estar una semana tranquila. Dirán que soy una trastornada de mierda, pero nooooooooooooo. El mundo se empeña en volverme loca.
Hombres... Si me mandan muchos mensajes son unos pesados, pero si no me mandan no les importo. ¿A caso no pueden mandar en el momento justo?.
Si hablan mucho son insoportables, pero si no hablan unos pesados de mierda. Y si querido aver si podes medir cuando hablar y cuando no pelotudo, sabes hablar desde los dos años, pedazo de hijo de puta.
Claro el señor no me invita a salir nunca es un forro de mierda, ahora si me invita siempre me afixia. Aver...¿ No sabes que significa una vez por semana?
ASIQUE SON TODOS IGUALES, SIEMPRE ARRUINAN ABSOLUTAMENTE TODO. GRACIAS POR EL SEXO, LAS NOCHES DE ALCOHOL DROGA Y DESCONTROL. GRACIAS POR LOS SABADOS. PERO LOS DEMÁS DÍAS...¿PODRÍAN IRSE BIEN A CAGAR?

Perdón, estoy indispuesta...
CLARO COMO USTEDES NO SE INDISPONEN NO SABEN QUE MIERDA NOS PASA ¿NO?.
ES FÁCIL DECIR: "HAY CALMATE UN POCO NENA, ESTAS LOCA"... FÁCIL. PERO A VOS NO TE VIENE TODOS LOS MESES UN DOLOR DE OVARIOS DE LA CONCHA DE LA LORA.
Nosotras pasamos por los nervios del parto y ellos se preocupa más que vos y te hacen una escena en el hospital...
AVER PELOTUDO A VOS NO TE ESTA POR SALIR UN PIBE DE ADENTRO, ¿SE PUEDE SABER QUE CARAJO TE PASA?


Puede ser que me equivoque en la mitad de las cosas que digo, pero aver si nos tendemos...

estoy indispuesta.

Cuento del siglo XXI[U:sitiodemirecreo]


Se lo había pedido muchisimas veces, y por fin conseguía que él le hiciera caso.

Llegó tarde, bastante tarde. Cosa así de dos horas.

Despeinado y con cara de cansado, dió un “hola” tímido y se dispuso a buscarlo. Ella, malhumorada le siguió. Comenzaba a desconfiar del resultado final.

Al fin lo vieron.

Salían en ese momento a desayunar, poniendo un stop en su trabajo. Hablaba enérgicamente con su compañero, abriendo los brazos como si de una flor se tratase. Las cosas no iban del todo bien, y se oían voces de despido. Su puesto peligraba. En realidad, el de muchos. Quizá el de todos.

Se peinó como pudo con su mano y se quedó unos segundos inmovil. Ella le empujó suavito para que espabilara y él, en medio sobresalto, metió su mano torpemente en la funda y sacó una flecha.

Apuntó como pudo, no sin antes tambalearse un poco y disparó a destiempo. Se movió la flecha, se movió él y se movió el mundo.

El resultado fue un disparo de lo más certero. Lo peor es que no fue a parar a él, si no a su acompañante.

- “¡Genial Cupido, ahora no solo no lo conseguiré, si no que tendré que esquivar a su amigo!”.

Cupido algo aturdido por la borrachera de la noche anterior, hizo media mueca y se desplazó lentamente hacia la nada de la que probablemente no había salido en mucho tiempo.

Se fué dolida, derrotada. Había aprendido una buena lección; dejar de creer en los cuento

La Batalla Definitiva.[U:josef]

Ese amanecer dejamos atrás la tierra; habíamos fracasado. En los rastrojos de un mundo reseco y maltratado quedaban desmenuzados para siempre sentimientos de derrota: Romances, promesas, amores sin rumbo...
La ambición el egoísmo y el odio ganaron la partida, fueron siempre un paso por delante. Dejábamos atrás el planeta que nos acogió y vio nacer durante milenios, y pese a superar adversidades y vencer a enconados enemigos, éramos incapaces de preservarlo. Partíamos rechazados por una naturaleza que nos expulsaba como: parásitos, virus, bacterias devastadoras. Con los corazones deshechos dejábamos el lugar que una vez fue un paraíso y donde amamos, odiamos, sentimos y en definitiva, aprendimos a ser quienes éramos.

Me aferré a la escotilla desde la cual podía ver el jardín de mi infancia; mi cuerpo temblaba enfebrecido. ¿Qué jardín podría sobrevivir a un lugar donde las plantas sucumbían a los rayos gamma y el sol abrasaba? ¿Qué ser vivo podría subsistir en un planeta colapsado por novecientos mil billones de seres? En cambio, los círculos de aluminio que conformaban el túnel por el cual discurrí, estaban donde siempre y allí permanecerían.

Por fortuna me quedaba ella. Se había instalado junto a mí y allí seguía, en silencio, compartiendo mi profunda amargura. Superamos siempre los trances más difíciles y en cambio ahora ¿por qué la voluntad de una raza de espíritu indomable se veía, de pronto, doblegada? ¿Por qué deshojar tanta belleza tras tenerla al alcance y haberla disfrutado? Lo sabía. No había alimentos. Y donde no hay alimentos, con tal de echar un bocado, los espíritus desarrollan formas malignas e irracionales. El desorden y el canibalismo se habían extendido y ahora, no quedaba nada. ¡Nada qué hacer ni por lo cual luchar! Todo estaba perdido. ¿Todo? ¡No! Iríamos a Marte. Allí había hombres que nos esperaban. No tenía miedo, estaba tan seguro de mí mismo como de nuestra estirpe.

Giré sobre mí y nuestras miradas se encontraron. Allí estaba Lisa. Sus ojos de azabache brillaron con intensidad al mirarme, y su pelo rubio pareció lustrarse sobre su preciosa nuca. Su embarazo estaba ya en avanzado estado de gestación. No lo dudaba, pensé con renovada esperanza, iba a ser el orgulloso padre de una prole de diez ratas, o más...
Pronto estaríamos listos. Volveríamos a luchar y a vencer en la batalla definitiva.

CORDURA[U:tequendama]

Me detuve en el jardín, el césped y las plantas, estaban abandonados, la antigua belleza se había perdido. Debería comenzar de nuevo y convertirlo en un parque florido.
Se abrió la puerta de entrada y Carla salió a recibirme, me abrazó y me dejó su beso en cada mejilla.
—Mi querida le dejé todo en orden —me dijo— el polvo y tantos meses la casa cerrada dejaron olor a humedad. En la cocina le preparé el té y en la heladera hay pollo para la noche. Me voy que mi niña ya sale del colegio. Me entregó las llaves y se fue. Al entrar, la emoción bajó en lágrimas que no quise contener.
¡Mi casita! como la extrañé.
Recorrí los ambientes, todo estaba igual, sólo yo había cambiado. Me miré en el espejo, había adelgazado, la ropa me sobraba dándome un aspecto desagradable. Fui a la cocina y me serví el té, taza en mano me dirigí al living, me estaban esperando.
—¡Cuánto los extrañé! —Les dije— sé que ustedes también. Un año es demasiado tiempo y más aún internada en un psiquiátrico. No saben que frío hace por las noches, los gritos de los internados retumbaban en la soledad de mi celda, sí, de mi celda. Me alojaron en una con paredes acolchadas, venían los médicos varias veces al día me inyectaban, hacían preguntas y me daban pastillas, verde a la mañana, roja por la tarde y dos rosas por la noche. Durante meses viví ese infierno, hasta que comprendí que debía mentir —me senté, ellos me miraban sin entender— ¡Mentí! Comprendí que al decir la verdad ofendía sus patrones de lo ellos consideran cordura. Así que desde hoy, yo no los conozco. Vivo sola. Ellos, mi familia, vendrán a visitarme, harán preguntas y yo disimularé la verdad, y así seremos felices como antes. ¡No lloren! ¡Yo los amo! pero la sociedad no entiende que yo viva con dos fantasmas, ¿Comprenden?

Homenaje[U:nada]

Mario y Carmen terminaban de ensayar la última parte de la nueva obra de teatro que estrenarían el próximo mes, cuando recibieron la buena nueva.
Por fin luego de nueve años seguidos de hacer teatro ,Carlos su entrañable amigo y compañero de tablas por fin seria homenajeado por su gran contribución al teatro nacional; “en reconocimiento a la admirable ejecución del papel de Judas en la obra Jesucristo Súper star el señor Carlos Frolia se le otorga el premio Nacional LULI como mejor actor de reparto del año en vigencia” estas eran las palabras exactas que se podía leer en el correo que Mario y Carmen llevaban en sus manos mientras corrían alegres al camerino de Carlos a darle la gran noticia;
Por fin llega tan merecido premio le decía Mario a Carmen, Carlos siempre fue el mejor de todos nosotros su capacidad para compenetrase con sus papeles es admirable….
Tan pronto entraron en el camerino de Carlos las risas se tornaron en un silencio profundo y cortante.
En medio del pequeño camerino yacía Carlos pendiendo del cuello atado a una soga a la única biga horizontal de la habitación; bajos los pies todavía danzantes de Carlos se hallaba un pedazo de papel, al recogerlo Mario noto que solo tenia escrita dos líneas:
“si, es cierto. Soy demasiado bueno para compenetrarme con mis papeles, me felicitaron toda la vida por ello; si es así ¿por que tenían que darme precisamente el papel de Judas?”

Rigor Mortis[U:rigores]

Allí estaba ella boca arriba, inerte, en rigor mortis, su blanca tez y tonificado cuerpo aún no estaban cianóticos, su bella cabellera dorada y sus mucosas aun mantenían su brillo natural; Isaac se había preparado toda su vida para este momento, 15 años de planes y maquinaciones para ser exactos...ahora surgían las dudas de ultimo momento ¿habré hecho lo correcto? , ¿Por donde comenzare a cortar? ¿Como fluirá la sangre? ¿Que aspecto tendrá? ¿Que color, que olor tendrá? ¿Como sonará la sierra al cortar su carne? ¿Sus huesos se cortarán con resistencia o será como cortar mantequilla derretida? y entonces parpadeo varias veces secándose la sangre que le salpico el rostro, producto de su primer corte, regañándose por la distracción, se dijo concéntrate, concéntrate, solo haz tu trabajo, que tienes solo 2 horas para tu primera autopsia y los demás estudiantes necesitan la sala para realizar su práctica.

Sarabi [U:tsubasa]

Entraron dos gitanas (esas que adivinan la suerte), el reloj de la iglesia anunciaba las 10:30 de la noche y antes de la madrugada, me dispuse a dormir un rato, a fin de cuentas era temporada baja.
Al cabo de un rato, (2:30 hrs.) comencé a escuchar ruidos extraños que provenían de piso 2 ; en la 24 , frente a la construcción nueva del Sarabi. Subí las escaleras y en ese momento las gitanas se disponían a abandonar la habitación; cargando sus maletas, les recordé con voz firme: aún no son 24 horas de su estancia en este lugar, ¿qué sucedió? pregunté, nos vamos, contestaron, no podemos dormir, ¿ por qué? volví a cuestionar. Escuchamos ruidos muy extraños, hay algo aqui que nos esta molestando, respondieron con enfado, entregandome de inmediato la llave. Como era de costumbre, revisé que no faltara nada, me dí cuenta que altaba el control de a TV a gritos les dí acance en el cruce de la avenida, ivan como ¡alma que lleva el diablo!, aseguraron que el control estaba sobre la cama, siguiendo su camino sin mas explicaciones. Al regresar al 24 con asombro me dí cuenta que el aparato estaba donde se me había indicado.
Se apoderó de mí el pánico, al recordar los ruidos y cosas extrañas que había escuchado semanas atras al caer la noche: El crujir de unos pasos sobre la grava, sombras siniestras de seres de ultratumba, la TV del 27 prendiendo y apagandose sola, los ventiladores cambiando de velocidad una y otra vez. ¡Una mano peluda me quiere agarrar!, me ¡paralizo!, ¡grito desesperado!, ¡comienzo a sudar !, ¡grito mas fuerte! pero nadie me escucha. Bajo as escaleras precipitado con los ojos desorbitados y ¡aaaaahhhh! ¡haaayyyy! Caigo en un sueño profundo.

"Monos en la sombra"[U:fjsantalices]


Érase una vez un mono, que señalaba a nuestro astro rey: el Sol. Se quedó todo el día viendo la luz que desprendía. Hasta que se marchó… Su tristeza le inundó los ojos y solo deseaba que volviera a aparecer tras el final del océano. Un día después, al amanecer llamó a todos sus compañeros para que viesen ese gran espectáculo. Éstos miraban hacia donde señalaba pero no entendían qué era lo que quería este mono que viesen… No tenía sentido mirar esa bombilla, además, la luz les molestaba a los ojos. Después de una semana, sus compañeros murieron… El mono se preguntaba que porqué murieron todos ellos pero el no… Él simplemente observó que los demás monos zarandeaban y tropezaban con plantas y árboles acabando ahogados en el lago…

“¿Porqué se tiraran al lago mis compañeros? ¿Qué les sucede?” Se preguntaba el mono a diario…

Un día se preguntó si sus compañeros monos habían visto algo en el astro rey que les había llevado al suicidio, y lo comenzó a ver, un día tras otro, fijamente… Finalmente, murió también ahogado…

Este mono un día llegó a ser capaz de apreciar algo bello y no entendía nada, pero sabía que su vida giraba en torno a eso, una voz se lo decía… Por ese motivo sabía que debía disfrutar de su belleza, de su luz, por lo que miraba el azul del cielo, el arco iris a lo lejos, los reflejos en el mar, su sombra, los ojos de sus compañeros brillar ante él. Sus compañeros cuando fueron avisados para observar ese bello espectáculo, sólo eran capaces de ver una bola incandescente que les permitía vivir, ya que la penumbra de su ausencia les obligaba a esconderse… La ceguera de sus mentes les produjo su ceguera… Tenían delante la mayor belleza y ellos simplemente buscaban un más allá en eso tan simple ignorando su inexistencia… El mono, curioso, intentó comprender porqué sus compañeros habían fallecido y cometió el error de ser como ellos… de ver más allá, por lo que la luz impasible lo mató…

Fui una desilusiòn:[U:lmarianela]

La vida no es plana y vaya que me di cuenta, todo sucedio cuando por querer sacarme una pena grande del corazòn, decidi vivir una experiencia extrema, prohibida y no imaginable. Siempre dije que iba a ser leal y como siempre uno dice cosas que con el tiempo, van sufriendo modificaciones, dependiendo de las situacines que se van presentando Abri una pàgina virtual con un seùdonimo seductor y convoquè solo a personas discriminadas, atipicas y alejadas de todo orden normal, alli comencè a relacionarme con esas personas en forma libre y sin tabues: escribia solo relaltos eròticos y conquistadores, hasta que me enamorè virtualmente de aquel desconocido, el me provocaba la magia de juventud, acaloramiento infinito, incluso fui al cardiòlogo porque pensè qu estaba enferma del corazòn, pero lo ùnico que me pasaba era que tenia una pasiòn desenfrenada y cuando estuve a punto de alcanzar la luz, supe que no era de su fenotipo.

El insensible.[U:pithusa]

salí a buscarlo de madrugada. Lo extrañaba enormememente y me preocupaban sus salidas nocturnas. Sólo él podía permanecer a mi lado muchisimas horas horas sin decir nada. Su dulce mirada llena de amor y agradecimientos, me tenía cautivada, y a pesar de querernos y de necesitarnos, igual aveces me abandonaba saliendo a escondidas, como un bandido.
Lo busqué por los alrededores del barrio, pregunté a unos amigos que tenían su propia fiesta en la plaza, si lo habían divisado....Nada, no lo hallé.
Regresé a casa llorando, prometiendome una vez más no volver a salir en su busqueda.
El cansancio y la pena, vencieron mi insomnio. Me dormí con la tv. encendida. Si regresaba, sabría que lo estuve esperando, porque dejé el plato servido con su alimento favorito, en el lugar de siempre.
Al día siguiente me despertaron sus suaves caricias. Me alegré de verlo, no dijimos nada.
Se acosto a mi lado cansado de tanta juerga. Tuvo más de alguna riña callejera. Curé sus heridas mientras le preguntaba....¿ Por que me haces sufrir de esa manera...? ¿ Cómo puedes ser tan inconsciente....? Él me miró con sus verdes ojos de gato didiendo...¡Miau, Miau !...Y se durmío.

Sin titulo 2[U:la_mirada_azul]

¡Déjenme ir!, intento gritar y es solo un gruñido, tengo las manos atadas y no puedo sacarme lo que sea que tapa mi boca, que me ahoga y me lacera la garganta, creo moverme convulsivamente pero ya ni estoy segura de estar haciéndolo.
Las luces ciegan mis pupilas fijas y están estos hombres y mujeres que invaden mi cuerpo, me hacen descargas eléctricas y gritan tapando mi agonizante respiración. Quiero soltarme, incorporarme y correr, pero no puedo, ya no me torturen ruego en mi mente, porque las palabras no salen y las pienso fuertemente con la esperanza que lleguen de alguna mágica forma a sus pensamientos, ¡déjenme ir!
Un ardor corta mi vientre e intuyo que se abre como una fruta madura que cae al piso, el dolor me atraviesa las entrañas y corre por el cuerpo por cada nervio, músculo y arteria. Ya no siento las piernas y me falta el aire, una comezón insoportable en la cara que ni siquiera puedo tocarme.
Un líquido viscoso y tibio me chorrea por las piernas y ya sin dolor, siento que hurgan y arrancan parte de mi esencia.
- Nada mas se puedo hacer, oigo como desde lejos, solo pudimos salvar al bebé.
Quedo en la camilla con el respirador atorando mi tráquea, atados los brazos en cruz, desvaneciéndome en el alivio del dolor pero sabiendo que jamás acunaré a mi niño.

SUPLICA[U:zepol]

Estoy hasta la mismísima coronilla de que siempre me invites a participar en concursos en los que nunca gano.

Pero esta vez será diferente. No te voy a dar el gusto de rechazarme. ¿Sabes por qué? Simplemente porque esta vez no voy a participar.

Y si por esas extrañas cosas del destino que caen fuera de nuestro control, se te imagina que esto es un cuento y que me sirvo de él para entrar al concurso, te anticipo, no te equivoques, esto no es un cuento, es una ferviente súplica. Una canción desesperada, la número veinte, creo, que en cuatro palabras podría resumir así ¡vota por mí, carajo!


El forastero[U:almalen2005]

Camina casi arrastrándose, con una mano trata de cubrir la herida provocada por un tiro certero , mientras hilillos de sangre se escurren por sus dedos . Las fuerzas flaquean , se le nubla la vista y de pronto se encuentra de bruces en el suelo . No da más, se le entrecorta la respiración y como puede se acomoda sobre el ralo pasto de una plaza desolada en una tarde gris de otoño. No quiere cerrar los ojos , pero el cansancio lo puede y el dolor lo aletarga con una confusión de palabras e imágenes que pueblan su febril mente .

¿Cuánto tiempo pasó así ? difícil de responder , un exquisito perfume enciende sus sentidos y lentamente se despierta encontrándose con el dulce rostro de una bella mujer que lo observa y con un dedo sobre sus labios le impide hablar; mientras desabrocha uno o dos botones de su descolorida camisa negra , y afloja el cinturón raído y las viejas botas y tomando el saco de él lo coloca bajo su cabeza a modo de almohada . ¡ Vaya alivio ! piensa el forastero mientras ella presurosa trae agua de una canilla cercana en un recipiente que por ahí encontró. Lava su cara , las muñecas, limpia la herida, acomoda sus cabellos y luego le da de beber. Se siente reconfortado y quiere hablar . Como puede le cuenta de su infancia pueblerina , de sus travesuras adolescentes de sus amores de juventud ….Ella lo escucha profiriendo pocas palabras , acotando algo. Va hasta un barzucho próximo y vuelve con un humeante café bien cargado , que él bebe de a sorbos. Está mejor. Ella lo arropa, le da un beso en la mejilla y tomando su mano le promete acompañarlo hasta el día siguiente. Se duerme. Quizás sueñe con las palabras que dijo su agresor “ Esta noche , ella vendrá a buscarte” y ahí nomás le disparó . La profecía se cumple , ella vino en su busca y se lo llevó.Ella, la dulce y servicial joven. Ella, la muerte.
Los ladridos de los perros vagabundos que pasan por el lugar, llaman la atención de algunos obreros que se acercan hasta donde está el forastero muerto. La leve sonrisa que ilumina aún su rostro, denota que murió en paz.

Jugar a vivir.[U:leobrizuela]

El desafío estaba lanzado: sería en la plaza, a las siete de la tarde..

La placita se había convertido en un campo de batalla, donde dos tribus antagónicas libraban sordas luchas. No eran guerras cruentas. Ni siquiera peleas donde imperase la agresión física. Se trataba de niños. Los mayorcitos contaban con unos once años.
El Pelado y el Canilla eran los dos jefes tribales y se disputaban la primacía de un imperio imaginario.
Y esta tarde, por fin, se enfrentarían.

Los dos grupos llegaron a la plaza y se ubicaron alineados detrás de sus jefes que, enfrentados, se miraron desafiantes. Los ejércitos son absolutamente heterogéneos: algunos soldados son niñas de cuatro años, hermanas de otros contendientes más crecidos, muchachitos de siete u ocho y algún segundo de los jefes, que son los mayores del conjunto.
¾ ¿Empezamos? ¾pregunta el Pelado.
¾ Empezamos ¾responde el Canilla.
¾ Prohibido sostenerse de ningún lado ¾aclara el Pelado,
¾ Tampoco se puede cambiar de pierna más de una vez ¾determina el Canilla. ¾ El que lo haga pierde el juego.
Es una contienda extraña: se trata de ver quién logra mantenerse el mayor tiempo parado sobre un solo pie, cumpliendo las reglas impuestas.
A una señal, todos levantan una pierna. Algunos la izquierda, otros la derecha, todos se sostienen en un único pie.
Enseguida, los más chicos son eliminados. La plaza se va despoblando; los que salen del juego deben retirarse a un costado. Entonces, los del equipo contrario festejarán a los gritos como si hubieran convertido un gol, o algo parecido.
Hace casi media hora que el desafío ha comenzado. Sólo el Pelado y el Canilla quedan en el juego, mirándose con gesto torvo. Sí, son los más fuertes, pero también son los jefes y no pueden defraudar a sus acólitos.
Nadie habla.
El respetuoso silencio comienza a alterarse.
Un sonido extraño llega desde uno de los callejones. Una sombra se acerca; se oye más nítido el golpe, que ya se adivina en el piso adoquinado.
Un hombre cruza, indiferente. Le falta una pierna, y el ruido es producido por la muleta con que se ayuda para caminar.
Los rivales se miran. El Pelado, despacito, comienza a bajar la pierna. El Canilla no se hace esperar y también baja la suya.
Mirando el piso, se irá cada uno por su lado.
El silencio se hace total y la noche va cayendo en la plaza desierta.



“Mi sueño contigo”[U:rafaela66]

Esa noche de luna llena y acompañada de los luceros que titilaban en el firmamento emprendí un paseo conducida por una dulce brisa que acompasaban mis pasos; mis caminos me llevaban por senderos desconocidos, me abrí entre los árboles que se mecían por el suave vaivén de sus tallos, llegue a un riachuelo de aguas plateadas y de corales de luz, mi cuerpo disfruto de sus límpidas gotas que a la luz de la luna parecían escarchas escapadas del mismo cielo, sacie mi sed de pasión en esas transparentes aguas, y así continué mi marcha divisando a lo lejos el resplandor de una estrella, me acerque a la orilla de la luna y descanse, la estrella se acerco acarició mis pies desnudos y cansados mientras yo disfrutaba el hermoso espectáculo que me brindaba el universo.

De repente entre tanta calma y armonía escuché unos sollozos…me sobresalte y me escondí detrás de la estrella, pero mi curiosidad era mayor a mi temor y observe con asombro que eras tú quien estaba llorando en tu alcoba en tinieblas, suspirabas y gemías de soledad, te levantaste al sentir el destello de mi estrella, me escondí de nuevo temiendo me descubrieras, te quedaste observando la estrella con atención como si adivinaras que estaba oculta detrás de ella; luego volteaste y continuaste llorando pero ahora con más dolor, caminaste por la oscuridad y de nuevo la estrella ahora alumbró con más fuerza y pudiste divisar que donde los rayos llegaban había en el suelo una hermosa rosa, la miraste detenidamente y al fijarte en el centro de sus pétalos…ahí estaba yo…

De tus ojos volvió a escapar una lágrima y yo la seque, te acaricie tu rostro y desaparecí y como un loco me buscaste, te asomaste por la ventana tratando de encontrarme, te quedaste pensativo y luego en tu rostro se dibujó una hermosa sonrisa mientras repetías mi nombre, yo te observaba a lo lejos y ya contenta porque tus suspiros ahora eran tranquilos, te dormiste y tu sueño era apacible, te contemplaba, te acariciaba con la mirada, recordando los bellos momentos vividos, emprendí mi camino acompañada por la luna, satisfecha, caminé y cansada me recosté cerré los ojos y cuando los abrí comprendí que todo había sido un hermoso sueño, recordando que la vida es un sueño y yo había vivido el más hermoso contigo.

Botella al mar.[U:sajonio]

La cuenta de los días se le ha perdido. Siempre acostado en el fondo del bote, sólo puede ver el sol, balánceandose allá arriba, y oír el ruido del mar.
Eso es todo.
Último sobreviviente del naufragio, ayer consumió la última lata del último paquete de provisiones. Tampoco hay más agua.
Hace unas horas, oyó pasar un avión. No lo pudo ver; volaría muy alto, sobre las nubes.
La piel calcinada, los ojos inyectados, la lengua reseca, todo su humanidad es un despojo vivo.
De pronto, algo golpea contra el bote, dos, tres veces. Se arrastra hasta la borda y la descubre: una botella flotando. Se aleja y acerca en cada oleaje.
Estira el brazo y la toma. Tiene un papel adentro. ¿Un mensaje? ¡Lo vieron, entonces, desde el avión!
Sin fuerzas, quita el tapón con los dientes. Extrae el papel. Con la vista quemada por el sol, apenas puede ver la escritura.
Por fin, dificultosamente, lee el mensaje.
“Estoy perdido en el océano. Soy náufrago del buque Neptuno. Ayúdenme”
Desolado, temblando, apenas logra reconocer su propia letra, escrita semanas atrás.

Mi vecina[U:clama]

Vivo en un barrio común. Sin grandes casas, ni grandes jardines, ni grandes personas.
No tenemos médicos en el vecindario, ni ingenieros, ni abogados. Algún comerciante, muchos trabajadores, decenas de estudiantes. Ningún policía ni políticos. Nada especial.

Bueno… quizás mi vecina, la de la derecha. La del jardín chiquito y el pasillo hacia la puerta de atrás, a su cocina.
Pero, no sé. Porque se me hace que hay muchas como ella.
Especial porque es “mi” vecina… nada más.

Como siempre que tengo ganas de comer huevo frito, algo me faltaba ese día.
Esa vez fue la sal. Se me había terminado la noche anterior y lo olvidé.
Pan, huevo, aceite… sí. Sal no.
A pedirle a mi vecina…

La encontré lavando la ropa y refunfuñando.

__ La hora que es y estas manchas que no salen !
__ Lo mejor para las manchas es “Tlenet… y chau manchas !”.
Me sonreí al ver su reacción:
__ Para “Tlenet” estoy yo ahora, con las pocas monedas que me quedan ! … Y hasta que me paguen faltan como diez días … !!
__ Siempre hay una ayuda a mano para tus problemas de dinero ! ¿Fuiste por PrestaFácil?
__ Claaaro !! ¡ Como si después las cuotas las pagaran mis vecinos ! ¡No me pongás nerviosa! ¿EH? que me pongo loca y vos sabés lo que pasa después…
__ El stress te mata !! Hay que cuidarse y quererse más. Si andás con nervios lo mejor es …

La frase quedó inconclusa. La ví dejar con bronca la ropa en la pileta y darse vuelta con furia
__ ¡ Te dije que no me jodieras más ¡ ¡Que me tenés podrida con tus consejitos estúpidos! ¿Te vas a callar o no te vas a callar?

Su cara estaba desencajada y tuve miedo cuando la vi estirar su brazo.
Apagó el televisor de un golpe que lo hizo tambalear.

Por eso me alejé de la ventana y decidí no entrar.
“Mejor le pido sal a mi otra vecina” pensé y volví sobre mis pasos por el pasillo... sin hacer ruido.

Papá" de Chorros[U:chorros]

Y de pronto recordó que tenía que hablarle a su papá. Tomó el teléfono y lentamente marcó el número. Sonó tres veces, hasta que la grave voz de su padre contesto.
- ¡Mija! ¿Cómo andas?
- ¡Hay apá, si supieras!, hay días que como y otros que ni media tortilla.
- Ta mal eso hija, pero ya verás cómo se arregla todo, ya ando en el otro lado.
- ¿Es verda eso?
- Así es, ¿cómo la ves?
- ¡Requetebién apá! ¿Ya trabajas?
- Ya, conseguí una chamba labrando la tierra y pus no me pagan mucho, pero algo es algo. Después te mandare el money, pa´ que llenes esa barriga.
- ¿Má y ese money quien es? ¿al menos esta guapo?
- ¡No mija! No es una persona, el money es dinero, pero en ingles.
- A no pus, entonces no me lo mandes, que lo que necesito es algo pa´ llenar mi corazón.
- Usté no se preocupe que con el dinero se consigue un chaval.
- ¿De verda pá?
- No te miento mija, esos cabrones lo que buscan es dinero y belleza nomas. Como tú eres bella, no te preocupes.
- Gracias apá, necesitaba oírte. Ya te extraño, ¿cuándo vuelves?
- Ya no voi a volver. Cuando junte mi lanita te traigo pa´ca. A vivir con migo.
- ¿Cuándo, cuando?
- Aguántate tantito mujer, que todavía falta. Apenas estoy empezando.
- Es que apá todos los días pienso en ti, te extraño muchote.
- Yo también mija, yo también.
- Te quiero a chorros apá.
- Yo también chiquita mía.
Solo moviendo sus labios, sin fuerzas, se despedía de su padre. Y de pronto recordó que no estaba en su casa, sino en medio del desierto. Creo que podía ver la frontera desde donde estaba tirada. No hizo ningún esfuerzo por levantarse, ya no podía. Sabía que se quedaría ahí y que ahí conseguiría dinero y un chaval que la quisiera. Cerró los ojos.

El obsequio[U:beto1963]

Escribí unas notas, en la pequeña tarjeta, en ellas abría mi alma, para cuando las leyeras
te dieras cuenta de todo el amor que sentía por ti, tu corazón palpitante deseoso de ver el obsequio, que con gran gozo aceptarías y luego besarías mi rostro, agradeciendo el gesto,
para regalarme un abrazo y un beso.

No fue así como yo lo espere, cuando me viste, solo una sonrisa me regalaste, había mucha gente, tomaste el presente y así muy rápido lo arrumbaste junto a otros que estaban en el sillón, al caer ahí, la pequeña tarjeta cayo, ni siquiera la viste quedando tirada , para que cualquiera que pasara por ahí la viera, menos tu.

La fiesta fue como las otras, había tragos, amigos, música y buen ambiente, pero esa actitud me tenia molesto, buscaba tu mirada entre el bullicio y gentío, pero eras el sol y
nosotros los planetas, que alrededor tuyo mirábamos tu vestido, resaltando tu belleza y encantos, era evidente que las miradas dibujaban más de lo que veían.

Comencé a retroceder, ni siquiera te diste cuenta, algo pise con mis pies, era la pequeña tarjeta, la tome y me fui. Volvería a casa y ahí sentado en mi puerta, esperando atento a
mis pasos a que yo entrara, me miro con cara bondadosa, con ojos de niño cuando espera
a su amigo preferido, a mi llegada daba vueltas por mi sombra, como un pequeño trompo
bailarín, siempre esta expectante y listo, para mostrar su áspera lengua y mover su peluda
cola.

No le importo, que en la mañana, golpeara su lomo, soltando lágrimas de dolor y un llanto
agudo y corto mirándome con pena, para mi regreso a casa ahí estaba alegre y sin rencor
la lealtad que me regalaba día a día, sin importar el castigo, me dejaron pensando en su fiel
compañía, un amigo, una mascota, un sencillo y noble animal. Me obsequiaba con sus movimientos de can, la virtud de un verdadero amigo, el regalo de dar por dar, sin pedir nada a cambio, solo compartir la soledad.

Termine estas nuevas notas, yo sentado en el jardín y el perro a mis pies, esperando con emoción…

“entre mas conozco a la gente,
Mas quiero a mi perro”…

"Lo vivido..."[U:huellys]

Cuando tu vas, yo vuelvo. Cuando tu crees conocer, yo ya lo experimenté. Cuando tu me dices que me quieres, yo te digo que ya pase por ello tan intensamente, creyendo que era real,que ahora dudo de las palabras de amor ajenas.¡ayudame!
Creí y me engañaron, confié y me defraudaron, pero lo vivido quedó ahi en el recuerdo, guardando solo las cosas buenas, anhelando tantas cosas que me gustaría repetir contigo, tantos momentos imborrables ,que te digo que cuando tu vienes yo voy a estar porque quiero volver a creer, quiero poder confiar, y quiero quererte, pensaba el perrito encontrado en el arcen de la carretera en un verano como otro cualquiera.

LA ESTRATEGIA[U:galadrielle]

El Muñeco García esperaba, apostado en una esquina, el momento oportuno para entrar en el apartamento de la viuda, aquella vieja cascarrabias que compartía la vivienda con su hijo, un burócrata apocado y tímido.
Había venido observando las costumbres de estas personas y sabía que a las nueve de la noche exactamente, apagaban las luces. Tenía órdenes de su jefe, el Chipilín Pérez, de conseguir una televisión de plasma y por casualidad se enteró de que la viuda y su hijo acababan de comprar una.
A las nueve en punto se apagaron las luces del apartamento, como el Muñeco sabía que iba a ocurrir. Dejó pasar una hora más para asegurarse de que la viuda y su hijo durmieran
y entonces se dirigió al edificio. La puerta exterior era pan comido. Ya el Muñeco la había analizado y la abrió, sin forzarla, en un santiamén. Subió sigilosamente hasta la terraza y desde allí empezó a descolgarse como un alpinista, por el foso central que daba iluminación a todos los apartamentos. Se sintió orgulloso de que su estrategia, tan cuidadosamente planeada, estuviera resultando tan bien. Entró ágilmente por la ventana de la cocina y ya dentro, respiró aliviado.
Se dirigió a la sala y allí, como esperaba, relucía la televisión, nueva y brillante, como esperándolo a él.
Cuando empezó a desconectarla del tomacorriente, lo sobresaltó en ladrido feroz de un perro, pero su corazón se estabilizó al darse cuenta de que el can ladraba en otro apartamento. El dueño del perro vociferaba furioso, lo que hizo sonreír al Muñeco.
“¡Cállate ya animal de mierda, carajo, que no dejas dormir a nadie, bestia peluda, SILENCIO!!”
Luego, un portazo y después, el silencio, como si el perro, regañado, hubiera entendido la andanada de insultos.
Ya con la televisión asegurada a la espalda con unas cuerdas, el Muñeco salió del apartamento cuidándose de no hacer ni el más mínimo ruido.
Consideró que bajar los ocho pisos con la televisión a cuestas no era buena idea y por eso decidió tomar el ascensor.
El Muñeco no tenía forma de imaginar que Carnicero, el doberman del vecino, había decidido pasar la noche dentro del ascensor, depués de que su amo lo echó de la casa de tan mala manera.
En el preciso instante en que la puerta automática se cerró tras él, toda la ciudad sufrió un corte de luz que habría de durar una hora. En la total oscuridad, lo único que el Muñeco pudo ver, fue el brillo de los colmillos de Carnicero, y pensó que después de todo, aún la estrategia mejor planeada es susceptible de tener alguna falla, que aunque mínima, puede tornarse desastrosa.

El congreso

Arribé a la terminal ferroviaria de Chhatrapati Shivaji, en Bombay, capital del estado federal de Maharashtra, en India.
Estaba tan desorientada ante lo desconocido que casi me orino en la bombacha (bragas) y para calmarme comí los últimos bombones de dulce de leche que mi madre me obsequiara en el aeropuerto de Ezeiza, Buenos Aires,antes de tomar el vuelo que me traería al congreso internacional de guías espirituales en este país.
Mientras esperaba que me identificara el enviado que vendría a recogerme para trasladarme al hotel designado con anticipación, en medio de la multitud que corría nerviosa de un lado a otro con sus bultos y valijas, decidí sentarme cómodamente y aplicar la técnica mental, simple y natural, que se lleva a cabo sin esfuerzos y que es útil para la reducción del estrés y para desarrollar a pleno la mente y el cuerpo de los que la practican. Dicha técnica de meditación trascendental se practica una o dos veces al día, durante quince minutos y con los ojos cerrados.
Tal fue mi compenetración que no reparé en que el movimiento natural de la estación comenzó a desplegarse exageradamente.
La gente alterada además de correr en desorden, gritaba y hablaba en distintos idiomas y dialectos, cosa que tampoco me ayudó para comprender sus palabras pues no oí a nadie expresarse en idioma inglés entre los apurados viajeros.
El idioma predominante en Bombay es el Malatí, lengua que desconozco por completo; el inglés, apenas ocupa el duodécimo lugar (y por supuesto, el castellano, ninguno)
El arte desarrollado en el entrenamiento de mi mente me permitió, de igual manera, tan absoluta concentración que tampoco reparé en el sonido estridente de la sirena de los bomberos anunciando la desgracia.
Hoy, al despertar en no se qué hospital público de la ciudad, vendada de pies a cabeza, supe que se había tratado de algo más que de una simple amenaza de bomba.

El aroma de la vida[U:beticita]

Tanto era el dolor acumulado que el azul del tiempo se fue transformando en negro rencor, el que bebía diariamente como su café amargo de cada mañana. Café soluble, caliente, con el mismo aroma a nada que su vida.
Muchos años de soledad acompañada, de sentirse poco más que un mueble, poco menos que un adorno. Sin voz ni voto, triste marioneta de un cruel titiritero.
El sonido monocorde de la lluvia gris golpeteando la ventana, acompasaba sus pensamientos de humo espeso en esa tarde de invierno, en que el frío metálico dejaba en su boca el mal sabor de la traición. Traición a sus sueños, a sus ideales y a su propio ser.
Ese maltrato, tan cotidiano como el pan de cada día, tan instaurado que ni siquiera lastimaba. Solo sembraba resentimiento, que crecía oscuro en su interior, tanto que ya no cabía dentro.
Estalló entonces la tormenta, arremolinando sus ideas y despertando una verde esperanza, que yacía anestesiada en sus entrañas.
Preparó las maletas, áspera su voz tronó adiós y cerró la puerta dejando atrás la agonía.
En la calle la lluvia había cesado, el olor a tierra mojada se introdujo por sus poros y el aire impregnado con el fresco perfume a libertad llenó sus pulmones, rojos de renovada pasión.
Deseaba fervientemente un café y se prometió que nunca más sería soluble, amaba el aroma al grano recién molido, intenso, como quería que fuera su vida.

Figuras Difusas[U:macacay]

Era tan duro y seco como el viento del oeste, pero igual que él, sabia ser cálido cuando sus manos ásperas y morenas le acariciaban la piel sedienta, tan despacio, que se olvidaba de la inacabable sequía y del polvo que tapaba a sus muertos. Mientras tanto, dejaba que su mente devanara pensamientos de su desventura, tratando de encontrarle un nombre a ese dolor clavado en sus entrañas, cada más agudo, en las noches que sentía las carcajadas humillantes en tugurios mugrientos, y su nombre asomaba entre copas de vino en la boca de ese hombre. La silueta rígida azotada por el viento, se enroscaba entre remolinos que la rodeaban sin moverla, sumida en esos recuerdos desde el día aquel cuando la mentira engañosa la trajo de sus valles a esos médanos grises y cambiantes, como su amor, que ahora la dejaba a un lado, sin importar aquellos ángeles que había parido en soledades. Sueños ya muertos en largos días de sufrimientos.
A lo mejor fue por eso que no le costo hacer lo que hizo, y no fue a ese amor, sino al extraño dormido en el catre al que mato esa noche, clavándole el cuchillo en el lugar exacto
Después, con el cansancio que la achicaba sobre la tierra seca, lo arrastro y enterró junto a esos sueños y ángeles muertos que corrieran junto a ella en otros tiempos, cuando era niña, entre valles y montañas sobre campos floridos y mágicos prados.
Figuras difusas que las arenas del viento esconderán por siempre en inmensos médanos grisáceos, como sombras rígidas deshechas en llantos.

EL MAL EJEMPLO[U:negritoplastilina]

En el interior del viejo edificio, el griterío era ensordecedor…

-¿Cuándo terminarán las obras en la sala de lactantes, señor? - preguntó malhumorada la enfermera del pabellón tres.

-No lo sé Rosita. Tenemos que poner orden en forma urgente. Si no diferenciamos a los chicos por edades, el orfanato se convertirá en un infierno. La conducta es un desastre y lo peor de todo, es el mal ejemplo…

El regente salió del comedor y se dirigió hacia el pabellón principal donde estaban todos los niños.

Visiblemente irritado, les ordenó:

-¡Atención! ¡Paren la pelota, carajo! ¡Se lavan las mano, la cara, e inmediatamente se ponen a estudiar!

Los chicos se amontonaron frente al piletón de los baños ganando sus lugares a codazos; no faltaron los insultos.


Asustado por el griterío, con las manitas aferradas al barral de su cuna, el bebito quiso incorporarse pero no pudo; tenía miedo, no podía hablar.

Al rato, más tranquilo, pensó: “¿Lavarme y estudiar? Este viejo está en pedo. Que se vaya a lavar el culo.” Y se durmió nuevamente.

Horas después, Rosita cambió sus pañales y le dio su mamadera; luego de eructar, continuó durmiendo

WARS[U:theinvisibleman]

En el año 480 a. C. estuve en el célebre desfiladero del norte de Grecia, entre el Monte Eta y el mar, donde 300 espartanos cayeron heroicamente para detener el infructuoso avance de los persas. Yo fui el primero de aquellos espartanos en derramar su sangre sobre Las Termópilas.
En el año 431 d. C. estuve en los Campos Cataláunicos integrando las huestes romano-visigodas que derrotaron a las hordas salvajes de Atila, Rey de los hunos. Yo fui el primer visigodo en caer durante la sangrienta contienda.
En 1429 estuve en Orleáns durante la victoria de los franceses, comandados por Juana de Arco, sobre los ingleses invasores que asediaban la ciudad. Yo fui el primero en caer bajo las armas enemigas.
En 1815 estuve en Bélgica, cerca de Waterloo, formando parte de las tropas aliadas que derrotaron al ejército de Napoleón Bonaparte. Yo fui el primer británico en caer al iniciarse la batalla.
En 1944 estuve en la mayor operación militar de invasión por mar de toda la historia: el Desembarco en Normandía. Yo fui el primer soldado estadounidense en perder la vida al pisar suelo francés.
Hoy es el año 2022. La profecía tantas veces enunciada por la ciencia ficción del siglo XX hoy es realidad: las máquinas se han sublevado contra los hombres. Yo integro las fuerzas de la Resistencia y estoy a punto de descender junto a mis compañeros de brigada sobre el campo de batalla. No tengo miedo. Ya estoy acostumbrado a ser el primero. La nave aterriza. Se abren las compuertas. Adiós. Nos vemos en la próxima gran guerra mundial.

Gracias a Nietzsche[U:jugama]

La fama de “Bill” el sheriff de Tumberstone no me dejaba dormir. Era mi único rival en todo el oeste americano además que se las daba de caballeroso, galante con las damas y generoso con los vaqueros ya que tenía muchos dólares obtenidos en asaltos a bancos y diligencias o en mesas de póker en las que, contrario a mí, que siempre fui tramposo Bill se atenía honradamente a su suerte… yo había leído a Nietzsche y sabia que la suerte había que doblegarla con la fuerza o con la astucia. Y el pobre”Bill”, el caballero que practicaba la moral de los débiles, no conocía a Zaratustra. Y eso fue lo que lo mató. Porque, tirando del gatillo de su Colt 45 era igual a mí, lo reconozco.
El también me odiaba, Hacía años nos buscábamos. Había que liquidar a favor de alguno de los dos la leyenda del oeste. Uno de los dos tenía que morir para que el otro quedara dueño de la fama…..y del vasto territorio.
La tarde del duelo en el bar de Joey “El matón” no cabía ni un alma.
Y de pronto nos vimos, desenfundamos a la par. Las colt 45 empezaron a vomitar balas. Con prodigiosa precisión cada plomo chocaba en su recorrido con el otro plomo, doblando su camino en ángulo recto. Ni una sola bala, controlada en el aire por el adversario, había dado en el blanco. El público, aterrado, pero fascinado con el duelo legendario, se había perpetrado detrás de lo que tenia a mano.
Pero en esto el Sheriff de Doge City, nos hizo una seña para que detuviéramos el estéril y original duelo. La contienda había que decidirla a la suerte. Y puso las condiciones. 20 pasaos de distancia y una moneda definiría quien dispararía primero. Yo acepte sin vacilar. En los ojos de “Bill” leí por una fracción de segundo su miedo. Claro, el no había leído a Zaratustra. Pero yo sí. Y antes de que la moneda cayera a suelo para dictar su sentencia, yo le vacié a “Bill” los 12 tiros de mi Colt 45. No podía arriesgar la vida al capricho de la suerte. “La suerte hay que doblegarla con la fuerza o con la astucia”, decía Nietzsche. Y el pobre “Bill” practicante y adepto de la moral de los débiles y de la caballerosidad cristiana, fue a morir contra el mostrador.
Gracias al filósofo de Engadina…..estoy vivo.

MUJER DE AGALLAS[U:za-lac-fay33]

Cuando enviudecio nana Pancha. Se puso a cargo de los tres negocios: a la hermana Queta en la tienda, al tarambana de su hijastro Talo en la curtiembre y ella al control de la talabarteria.
Al tercer o cuarto dia despues del entierro, el ayudante Lico Paz llego jadeante a la talabarteria:
-Nia Panchita! el "Catracho" cogio un monton de fierros y los metio en una alforja y dizque se va para Homduras.
-Y Talo no hizo nada?
-Lalo no ha regresado, se fue a ver a la Chavela al otro lado del pueblo.
Mi abuela se puso su sombrerito de petate y llamo al mulero:
-Mira vos Lauro, ensillame un caballo, no quiero que sea una mula, m'entendiste?
-Si nia Panchita, le ensillare al Zopenco.
En cosa de quince minutos ya iba en el camino con un trotecito. El tordillo era caballo andador y trotando era sedita.
Al cabo diviso al "Catracho" con la alforja sobre el hombro, le metio las espuelas al Zopenco que salio zumbado y al alcanzar al ladron, se le cruzo dandole tremendo susto.
Desmonto y s le enfrento, ella le dijo a el y el le dijo a ella, por un rato. Ella le dio tal pescozada que tumbo al "Catracho" por el suelo. Como estaba medio aturdido, le amarro las manos atras y le ordeno:
-Parate vos cabron, que regresamos al pueblo!
La entrada al pueblo hizo bulla: el "catracho" de cresta caida, Zopenco haciendo andaditos y nana Pancha la frente en alto y un machete desenvainado en la derecha, por si acaso.
Le echaron seis dias en banderas y al salir sin empleo, sin dinero, sin fierros y sin esperanzas, el "Catracho" siendo bueno para el jale, le pidio otro chance a mi abuela.
-Bueno, con otra trastada no te pego sino que te mato.
-No dona Pancha, se lo prometo. (el "Catracho" mantuvo su palabra por muchos anyos)
El dia que regreso, los amigos lo rodearon:
-Como fue que una mujer te pego?
-Lo que paso es que note que empunaba las manos, yo no le pego a mujeres, solo le vigiaba la derecha para hacerme el quite si me atacaba.
Entonces me dio el gran sopapo.
No sabia que era mujer de agallas ni tampoco que fuera zurda.

Tiempo vs amor[U:jcn]

Definición sin una conclusión es la orden de eber, el profeta enviado por el tiempo para acabar con el amor. Su cómplice otrio arrastra por sus caminos colmados de laberintos al amor, llegando a caminos sin salida donde uro, la sombra sádica negra de aquel callejón disfruta destruyendo las emociones y volviéndolas esclavos de su perversidad.
Marlon y Lina se encuentran en un bache dentro de su relación amorosa. Esla oportunidad de tier un viento de grilla eléctrica que en ese microsegundo de oportunidad quiere lograr un holocausto de dos corazones enamorados.
Tier aumenta su energía de poder contra la casa donde se refugian Marlon y Lina destruyendo los vidrios y atacando con escombros, la pareja desesperada y asustada se abrazan fortaleciendo un prospecto de amor. Paro el tiempo es su misma ley y ataca de nuevo con goefu un ser oportunista que se puede dividir en mil pedazos de brazas ardientes hostigando los dos enamorados.
La pareja huye de ese sitio y por nada del mundo se alejaran el uno del otro.
Cel, equial, burcho y ar, espíritus absurdos desvanecidos por la fantasía se fusionan transfigurándose en tilar el demoledor de amores firmes y sinceros. Sin remordimiento, provocando que las personas mueran de desamor.
El amor dispone de un mecanismo de resurrección que evoca dentro de sus propios corazones, al convertirlo en mataría resistente al tiempo. El tiempo exige una tregua al amor.
El tiempo no se salva ni de sus propias reglas, su sentencia previa he sido destinada a estar en una esfera de cristal donde nunca podrá salir con sus secuaces.
Las luces de esperanza proclaman la fuerza del amor hacia la humanidad porque es felicidad y siempre debe triunfar sobre todo.

Contrastes de un Recuerdo[U:englishrose]

El gris rueda por entre nuestros pies, el polvo queda suspendido en el aire. Me toma la mano y con violencia extrae cada pulsera. Pierdo mi oro, mis recuerdos y el ultrajo no termina. Una pistola y mi bolso se abre, entrego todo para luego percatarme que la persona que me roba es un viejo rostro conocido. Casi se escapan unas lágrimas, casi le recuerdo quien soy… pero he cambiado tanto desde entonces. Ya no soy niña de ojos alegres, de vestidos y trenzas, ya no soy su compañera de juegos, de sueños. Él, en cambio, sigue siendo el pequeño niño que me enseño como cazar mariposas y sobre la antimateria. El gris del ambiente, el azul de su chaleco, los temblores de mis dedos y la falta de memoria me obligaron a callar. Cuando lo vi, por fin, marcharse me pregunté….Qué habrá sido de mi querido niño y qué lo obligo también a olvidar.

El gris rueda por entre nuestros pies, el polvo queda suspendido en el aire. Le tomo la mano y tiemblo al recordar su tibieza, pero no me recuerda. Soy el que soy y debo actuar rápido, un tirón de reloj, un movimiento de pistola y gano la comisión de varios días…Ojala no recuerde quien soy, aunque he cambiado tanto. Ya no soy el niño tímido y serio, ya no tengo esa inocencia incrustada en la frente. Mas ella sigue siendo la misma, mi dulce niña, tiernos ojos y sonrisa de flor. Recordará las mariposas que le regale o como le enseñe a no temerle a la oscuridad. Tiembla ahora como cuando lo hacia de niña al tirarle sus trenzas, suspira ahora como cuando dejaba de correr. Pero nada, solo un acto, solo un trabajo más. Ahora que me alejo me pregunto si recordará, si ha cambiado después de tanto ciclo lunar.

La mariposa azul.[U:albaclara]

Había una vez un gusanito que llevaba mucho tiempo escondido en un viejo árbol porque se sabía feo y arrugado. Eligió el lugar más triste de aquél jardín abandonado, pensando que ningún niño travieso iría a aplastarlo con el pie, asustado de su fealdad, y ahora no se decidía a salir.
Sus pequeños ojos, mojados de llanto, vislumbraban tímidamente los atisbos de los rayos del sol, y su boca diminuta bebía ávidamente las gotas de lluvia que resbalaban por el hueco gris del árbol que le servía de casa. Afuera había flores, pero allí sólo tenía oscuridad y hambre. Estaba muy débil y decidido a morir porque inspiraba terror. En su mente de animal acorralado, el implacable tic-tac de un reloj le marcaba con crueldad el paso de las horas… y cubierto por un velo de angustia se dispuso a dormir para no despertar jamás. Se escondió aún más, y curvándose sobre sí, se quedó quietecito, quietecito.
No supo cuanto tiempo durmió, pero de repente se sintió alzado en el aire por unos dedos humanos. El sol lo cegaba. El jardín, invadido por niños sonrientes, parecía bellísimo y acogedor. “Después de esto- pensó- bien vale la pena morir”.
Y cerrando los ojos esperó que lo aplastaran. Entonces oyó como una melodía la voz de una niña que exclamaba alborozada: “Es la mariposa más bonita que he visto en mi vida”.
Se sintió colocado con delicadeza sobre una rosa. Estaban refiriéndose a él. El gusanito no podía creerlo. Quizás todavía estaba dormido y esto era un sueño. Se sacudió para despertarse, y sus alas azules lo elevaron sobre las cabezas infantiles. Era cierto, podía volar. Era una mariposa.
Feliz de despertar a una maravillosa realidad, la mariposa azul trazó en el aire una graciosa pirueta y subió más y más por sobre todos los niños… por sobre todas las rosas. Se posó entonces en el viejo árbol que la cobijara durante su fealdad y abrazándolo con sus lindas alas azules se quedó otra vez quietecita… muy quietecita.

El señor búho.[U:susana-del-rosal]

Yo nunca había visto un búho así de cerca. Claro que en los libros de primaria había muchas ilustraciones de búhos, pero de verdad verdad nunca vi ninguno hasta que papá trajo uno a la casa.
El pobre animal tenía un ala rota y no podía volar. Triste y abochornado se escondió en un rincón de la cocina cerrando los ojos con pesadumbre… ¡me dio tanta lástima!... era un señor búho con cara de hombre inteligente que cuando abría los ojos me miraba con una fijeza apabullante como si pudiera leerme el pensamiento.
Nunca lo vi comer ni beber. No sé cómo se mantenía con vida. De noche papá lo ponía en un árbol y por las mañanas lo encontrábamos encogidito en un rincón de la cocina.
Un día supe que el señor búho intentaba volar. Me asusté muchísimo cuando saltó solito hasta el árbol, dando unos chillidos muy feos. Pero el señor búho no deseaba irse. Todos los días bajaba a su rinconcito y se quedaba allí muy quieto, con sus enormes ojos pendientes de cuanto acontecía en casa.
¡Cómo me habría gustado verlo comer!... mamá me dijo que los búhos sólo comen lo que cazan ellos mismos y esto me angustió… ¿cómo, con un ala rota, podría cazar el señor búho?... y si no cazaba seguiría sin comer… quizás se moriría.
Ayer cuando me levanté, no encontré al señor búho en su acostumbrado rincón. Pensé que al fin se habría ido. Luego de mucho buscarlo, lo vi tendido con los ojos cerrados aparentemente dormido bajo el carro de mi tío. Había huido para siempre, y su rostro de monje inteligente se veía suavemente apacible… tristemente muerto.
Papá lo enterró bajo las piedras del patio. Allá lejos… ¿ves?... en aquél montoncito de tierra que tiene arriba tantas, tantas lilas.

Aquella otra muerte[U:divadelasflores]

Recuerdo claramente aquella tarde en que volcados el uno en el otro nos transformamos en una sola sustancia infinita como el mundo.

Conectados por el cascabel de tu sexo, exploramos todos los paisajes del amor y del deseo. Conocimos la terrible fuerza del magnetismo de nuestro libido. Asistimos juntos al deshielo de los polos. Todo en nuestros cuerpos se resumía en un solo ritmo acompasado de subir y bajar, de diástoles y sístoles, de vértigos y letargos, de: se agolpa la vida y luego se va. Así fue que por primera vez sentimos a la llamada “Petit Mort” venir sobre nosotros.

En la mas perfecta agonía en que se vence tu cuerpo mórbido sobre el mío, en el instante mismo en que te abres generosamente al amor, vuelco lo que soy y lo que tengo, vuelco el inequívoco rasgo de que existo.

Desde entonces como ahora, como cada tarde, como cada noche, como cada mañana en que jugamos a revivirnos, no puedo evitar preguntarme qué será de nosotros cuando llegue esa otra muerte definitiva, la de verdad, aquella que no se puede postergar y que no podremos compartir.

En todo esto pensaba cuando la tibieza de tu corazón tan vivo llamó a mis instintos más puros.

Desde esta gris butaca, desde este papel de espectadora te veo entrar desnudo en nuestro lecho: estás espléndido, como nunca, como siempre; me detengo en la belleza de tus hombros y ruego rodar por tu pecho de varón con mis ojos de ceniza, de ceniza.

Te veo mirarme, sabes que estoy aquí porque tú mismo instalaste la butaca en nuestra habitación para que nos contempláramos intemporalmente.

Te escucho nombrarme, te siento reclamar mi cuerpo entre sueños y sudores. Jadeas, y yo, con tantas ganas y sin poder; con esta urgencia sobrehumana de querer estar ahí contigo en nuestro lecho, experimentando aquella otra muerte que nos hizo sentir tan vivos incontables veces y no ésta miserable –que desde una urna- literalmente me tiene hecha polvo.

El buzón[U:adormecida]

La mujer llega apresurada y deposita su carta en el buzón de correo situado en la vereda, pero en un segundo la ve salir de nuevo por donde entro, la levanta y ríe a carcajadas sin saber por que ocurría eso y se marcha riendo, al rato llega un hombre oriental trayendo mas de una carta, que también son caen al piso después de introducidas, se agacha a levantarlas y trata de ver que es lo que pasa dentro del buzón, intentando mantenerlas adentro, mas era en vano, ellas volvían a caer de manera muy graciosa para el hasta que decide irse riendo, rendido.

Al cabo de unos minutos aparece un hombre rubio, alto , robusto, con sus respectivas cartas en mano destinadas a ser enviadas, las revisa una a una y las deposita en el buzón dándose cuenta que estas caían a la vereda como si tuvieran vida, con una expresión muy enojada se agacha a mirar el orificio del buzón, saca un arma de fuego, la introduce en el orificio y dispara furiosamente tres tiros en el interior del buzón, fue el ultimo dia en que este humorista ruso filmo una escena graciosa con cámara oculta para la televisión. Paso sus últimos minutos de vida en un buzón de correo.

sin parada ni retroceso ni faltas de ortografía ni final espectacular[U:never-as]

Estoy viendo la tele sin sonido, son unos vídeos gustosos sobre la materia de las cosas, como las alas de una mariposa azulísima, que no son pigmentos, si no haces de luz y tenemos encima de la mesa un montón de cosas para nosotos: un plato con tres nísperos gordos, agua y un gloss que sabe a rosa y un perfume que huele a cerezo, en su cajita redonda y simple, para después, que nos gusta
y me he dicho, voy a contarle algo a mivida (se acaba de posar una polilla en la pantalla y procedo a aplastarla, ya, se me ha escapado) porque, claro, tendré que decirte más cosas que te quiero,

te quiero

escribo esto ahora que nos hemos visto y desaparezco, así es como si no hubiera ocurrido, ves? una rápida solución... lo rápido que ocurre todo y lo lento que transcurre la nada sin ti, oh, es premio o castigo? premio, premio, premio, qué difícil callar cuando se dice...menos mal que no hay manos para teclear todo lo que pasa a la vez, todo tan comedido y tan noble y tan cuerdo, bueno, no tanto, no voy a escribir las risas ni las lágrimas

y, como en lo nuestro, esta tarde pensaba que, cuando más me gusta la luna es cuando decrece, me parece que brilla muchísimo más que cuando está llena, es como si el afán la hiciera más esforzada en lucir, eso pensaba

(estoy mucho tiempo sin saber qué, porque todo se agolpa, con lo fácil que me resulta contar lo que sea y lo difícil que me es), ...fíjate, (lo que hago ahora, es no volver atrás pero selecciono entre lo que pienso...qué jaleo), me resulta exagerado escribir todo el rato, como si no hubiera distancias, otras cosas.. también pienso que nada ocurre por casualidad

que me encanta verte y tocarte el culo en el bolsillo de atrás de tu vaquero, tu culo guapo y pensar que para la próxima, hemos de convertir los días en suyos, no nuestros, una mentira...


y ese cuadro de van der heyden, en el thyssen, que tanto nos gustó...

EXTRAÑO DESPERTAR[U:divinaluna]

Abrió los ojos y una luz cegadora, le hirió las pupilas. Sintió una opresión en el pecho y mucha sed. Trató de estirar un brazo buscando a Ernesto, y el frío del aire, la arrepintió del movimiento. La habitación parecía inundada de sol, pero ella temblaba.: -¡demasiada luz! – Pensó, y bajando los párpados, esperó que esas sensaciones nuevas se calmaran
A pesar del dolor en su centro, casi no sentía las piernas, estaban adormecidas, seguramente el calmante de la noche anterior aún hacía efecto en su cerebro, pero…-¡por qué le dolía tanto el cuerpo!-.
Trató de pensar en lo que haría en cuanto se levantara. Tenía el día tan ocupado que, hasta le dieron ganas de seguir recostada.
Poco a poco fue abriendo los ojos, con cautela y ahora la oscuridad reinante la llenó de temor, quiso gritar y salir de esa quietud extraña, pero su cuerpo no respondió. Tanteó la negrura ante sí y el espacio infinito a su alrededor se hizo cada vez mas extenso.
Al querer incorporarse advirtió desesperada que ya no tenía extremidades, quiso tocarse el rostro con sus dedos y con pavor descubrió que sus manos tampoco existían. Se preguntó al borde del llanto si estas inmensas tinieblas eran también producto de novísima ceguera.
Una solitaria lágrima escapó del ojo derecho. Ernesto tomó el pañuelo arrugado y la secó, reprimiendo el propio llanto.
Se veía tan hermosa en medio de los encajes y tules, que nadie hubiera dicho que llevaba veinte horas muerta.-

EL RELATO[U:elotio]


- Les contare - decía en circulo de amigas. - Algunos secretitos que he guardado.
- Soy la menor de mis seis hermanas y desde mi nacimiento me han tratado muy
bien, no me ha faltado nada, siempre soy la preferida y no es vanidad, creo que soy la más bonita.
Todas la escuchaban con sumo placer...

- En realidad, a pesar de mi corta edad no soy una mansa palomita, tengo también mis deseos como todas, mas cuando él se acerca. Al principio le tuve miedo, era demasiado viejo para mí. Yo una niña aun, pero conforme paso el tiempo me fui acostumbrando a sus caricias y a sus besos. Cada vez que lo desea: En la mañana, en la noche, hasta en la madrugada. En fin podíamos decir que era un viejo besador.
Todas rieron de buena gana...

- Ese fue el principio de una gran relación entre él y yo. Llego hasta el extremo de quererme bañar él a solas. Por supuesto que no se lo permitieron. Dijo que solo quería verme limpia.

- No muy le creyeron porque era tremendo, se había casado no se cuantas veces y divorciado otras tantas, tenia hijos regados por doquier, un Don Juan, según decían, a mi no me lo crean.

- Lo cierto es que yo quería que el algún día me bañara, sus manos eran suaves y tersas. Y lo que uno pide con todo su corazón se cumple. Se me dio que me bañara...

Las amigas pelaban los ojos de curiosidad y de morbo, pero calladas nadie preguntaba nada, para no estropear el hilo del relato.

- Por fin, sentí sus manos mojar mi cuerpecito, me acaricio suavemente y metió sus manos por toda mi intimidad y allí estaba yo, gozando de tan extraño y placentero momento. Fue la primera vez que un hombre hizo lo que quiso conmigo.
Me seco con una toalla sutilmente y no podía creer la satisfacción que sentí al estar limpia y cerca de él...
Las demás se frotaban unas a otras de la nerviosidad, pero en silencio.

- Y a partir de allí a cualquier hora me baña, me acaricia, me besa y soy tan feliz que no me importa lo que pase...
Se escucharon pasos...
- ¡Las dejo chicas, llegó el que me hace feliz!! dijo sonriendo...

Las otras miraban con la boca abierta, incrédulas, la felicidad de aquella pequeña taza de café.

A fuego lento[U:rene_ghislain]

Tres de la mañana. Calor sádico que ahoga y tortura sin prisa, aplastándome contra el piso de madera húmedo por mi transpiración de aceite. Recordar que esto fue un pantano, que el terreno ganado por el hombre para hacerlo habitable no pudo con la esencia de este infierno de plantas y mosquitos, de sapos, culebras y lagartos pero nunca de mujeres; no de mujeres como Dios quiso concebirlas.

Otro viaje a la cocina. Toda agua bebida es insuficiente y pareciera desaparecer de la boca sin dejar rastro, sin siquiera aminorar la velocidad del desgaste pastoso que no queda más remedio que saborear con asco.

Ducha número tres en las últimas cinco horas, agua fresca y tiritar con trágico placer, mirando hacia la flor de la regadera con los ojos cerrados soñando que camino con él bajo la lluvia, descalzos, desnudos y despreocupados, disfrutando de la visión de nuestros cuerpos y excitándonos en una sonrisa compartida que hace equilibrio entre lo inocente y lo sexual.

Nuevo ardor húmedo y violento entre las piernas que el agua fría no quiere desalentar, necedad de mis ojos apretados para no despertar de mi sueño, de mi fantasía consciente, breve escape hacia ninguna parte y regreso forzado cerrando la canilla y saliendo del baño sin secarme, regresando a la madera del piso del living para tratar de dormir boca arriba antes que el calor vuelva a tomar posesión del lugar y de mi alma.

El ventilador del techo no es más que una burda cuchara revolviendo esta masa turbia de aire cocinándose a fuego lento.

Mi mano derecha acaricia mi abdomen y quiero pensar que es él quien lo hace, quien baja sus dedos con firmeza y suavidad jugando a dibujar estelas de agua sobre la urgencia mi piel, haciéndome temblar ante la certidumbre de su hombría aproximándose a las puertas de mi delirio, penetrándome al fin, haciéndome suya en una truca de cuerpos tensos que se confunden en un nudo visceral.

Después vendrá la culpa y el llanto resignado; la sensación burda y sucia de un pecado recurrente que mi mano aún mojada me recrimina con humillación.

Dentro de poco saldrá el sol en esta parte olvidada del mundo. De algún lado sacaré fuerzas para repartir sonrisas entre los pobres y esperanza entre los enfermos, rogando que este ardor intenso que sabe calar mis entrañas pueda encontrar sosiego debajo de mi hábito.

PARANOIA[U:ororascajo]

Es difícil, muy difícil creer que todo no sea más que una horrible pesadilla y por momentos estás segura y por momentos te das cuenta que todo esto no se trata más que de una trampa. A veces, cuando sientes que todos te miran, cuando observas a uno medio raro observándote por un lado y a otro más raro todavía observándote por el frente, y te clavan la mirada, y tú sólo mirando y caminando, pero si están a la vuelta de la esquina, esperándote y te miran cuando pasas, y cuando los miras de frente con toda esa rabia que tienes guardada, con esa mirada incandescente por momentos presienten tu fortaleza y esquivan tu mirada, pero cuando apenas volteas la esquina ya están de nuevo sobre ti, hablando de ti, sólo de ti y escuchas susurrar tu nombre entre sus labios y tienes miedo, tienes tanto miedo que uno se te acerque, y si alguno se te acerca sabes que es el final, sabes que todo está perdido. A veces te detienes unos instantes y miras a todos lados para saber si aún estás metida en la casa, a ellos les conviene que sigas allí y no salgas y no veas la luz, pero como odiarían el día en que te armes de valor y te claves a uno durante la noche mientras duerme para compensar todas la muertes que has tenido que ver desde que fuiste pequeña. Aún recuerdo como mataron de un golpe a mi madre, como acabaron en segundos con mi padre, y presiento que acabarán conmigo en cualquier momento, ellos son unos malditos, no te dejan caminar ni un segundo, lo único que quieren es que desaparezcas, que te mueras. Son esos momentos cuando sientes rabia, mucha rabia y te jode que te reconozcan en cualquier momento y quieres huir, desaparecer y renacer en otro sitio donde no le debas nada a nadie y que tu nombre sea novedoso para tu entorno, donde el resto te conozca de otra manera y nadie sepa de tu pasado, ni de tus flaquezas, pero a veces no se puede, a veces….
El anciano ni bien la reconoció incrustada sobre la pared, con sus ocho patas largas y su infame color negro enrolló su periódico y la aniquiló de un golpe, dejando tan solo una desagradable mancha roja.

Casandra[U:trixxi]

En su concepto de vida, creía saber, que los infortunios eran parte de un proyecto divino.
Su arte, mezcla de determinación y fantasía, consistía en predicciones inciertas, a pesar de eso, tuvo sus momentos de fama y de gloria.
Debido a sus vaticinios muchas veces tuvo reclamos.
Por sus dudosas profecías y su incapacidad para enfrentar problemas reales siempre tenía a flor de labios una respuesta de entendimiento erróneo.
Por eso nada la salvó de su naufragio definitivo.
Casandra, poco a poco, perdió definitivamente el rumbo y al final, debió surcar su decadencia como una molécula de arena, navegando por el espacio cósmico.

El Duelo[U:jaimitoelt]

Estaba nublado y el funeral avanzaba con doloroso paso aletargado siguiendo la acostumbrada ruta que tomaban desde siempre los velorios, algunos lloraban amargamente sin consuelo, los más por apariencia. En eso rompió la lluvia y el cielo también lloró a mares un aguacero gris turbio de inusitada vehemencia; ahora ya no sé quién lloraba y quién no, era un funeral triste como pocos. La hora del epílogo, en el largo trecho a la postrera morada embozaba un frío de muerte; apesadumbrando aún más el duelo de los desconcertados deudos; quienes tiritaron empapados caminando por el barro, la última demostración obligada de afecto llenaba sus caras de rabia y rencor.

En una suerte de resarcimiento el frío ya no me importaba; además, aquí adentro... no llueve.


UNA TARDE EN EL PARQUE[U:selkis]

Mariona pasea con sus dos hijos por el parque de la Sagrada Familia. Hay turistas por todas partes, pero es lo que le queda más cerca de casa. Los niños juegan con un balón de cuero. Está empezando a desesperarse porque primero se les ha escapado a la carretera, luego se lo ha robado un inglés borracho y patético y por último han golpeado en la pierna a un señor que disfrutaba del sol sentado en un banco.

Caritat pasea a su perro todos los días por el parque de la Sagrada Familia. Dan una vuelta tranquila que finaliza en el pipican, cuando en realidad Chiqui ya ha orinado y defecado en casi todos los rincones del parque. A Caritat le gusta ver a los turistas vestidos como si estuvieran en la playa. Hay niños correteando por todas partes. Caritat decide entrar en el terreno protegido por vallas del pipican, cuando ve cómo unos niños dan un balonazo a un señor.

John no se ha acostado aún. No recuerda mucho del día anterior, sólo que empezó a cenar muy tarde, que luego le llevaron a un bar y que a las tres alguien le dijo: “Tío, ahora empieza la fiesta”. Y hoy había tenido que acompañar a su novia Kate a ver un edificio famoso. Había decidido esperarla fuera. Ha jugado al balón con unos chiquillos y después se ha sentado un rato al lado de un señor con gorra y gafas de sol que no sabía hablar inglés. Ha dormido hasta que Kate ha venido a buscarle.

A Ramirez siempre le había gustado el parque de la Sagrada Familia, pero hoy él día no le está siendo muy favorable. Unos niños le han dado un balonazo, un perro se ha cagado delante de él y la dueña no ha recogido la caca, un inglés borracho que apestaba a alcohol y a vómito se le ha dormido en el hombro. Además, el sol le da de pleno en la cara, pero eso no debería importunarle porque lleva gorra y gafas oscuras. Lo demás tampoco, porque hace seis horas que su socio le ha envenenado y le ha dejado allí, ya cadáver.

Resaca Crónica - Primera Parte[U:cooo]

Amanecí en un estado físico, moral y psicológico deprimente, con un notable porcentaje de alcohol circulando todavía por mis venas. Abrí el ojo que aun me servía y de inmediato me reconocí indispuesto para levantarme de la cama. Sentía un hambre de holocausto y el dolor de cabeza era fulminante. Palpe con la mano la gravedad de la hinchazón en el párpado y supuse que necesitaría un parche. El sueño acompañado de resaca dura muchas horas después de haber despertado. Bostecé contundentemente y percibí en mi boca un olor similar al de heces de castor y noté, primero con cierto escepticismo y luego con pánico, que a mi dentadura le faltaba un irremplazable diente blanco. Lloré por la inexplicable pérdida de mi incisivo y de mis ojos salieron dos lagrimas diferentes. Por un lado, una límpida gota como la de cualquier humano con la capacidad de llorar y por el otro, un lagrimón rojo con sangre que provocó un ardor inquisidor en la cavidad maltrecha de mi ojo. Mi situación era decadente y tenía que acudir a alguien. En primera instancia pensé hablarle a mi mujer y reconciliarme con ella, pero después del incidente de ayer lo más apropiado era mantener una sana distancia, aunque eso implicara que sería yo el que sirviera el desayuno, detalle inconveniente en estos momentos.

Reggaeton Demente [U:zambombo]

Mi suegra me baila reggaeton. La muy bruja pone un cidi y sube el volumen del estéreo. Comienza agarrando su cabello con las dos manos para luego mover la cabeza como si estuviera negando alguna petición. Una verdadera agonía auditiva la música, pero el cachondeo pasa a primer plano. Me toma de los brazos y me pone de pie. Se da la vuelta y comienza a agitar su hasta ahora lejano culo. Se acerca hacia mi, y bailando me raspa el pantalón. Empiezo a sentir algún indicio de bombeo sanguíneo en mi miembro y la alejo de mi. Indiferente a mi rechazo, se tira al suelo, simulando una epilepsia. El manoseo que ella se otorga hace que la música no sea tan mala después de todo. Se levanta, dejándome ver unos prominentes pechos, dignos de un cuadro de Botero. Ya de pie, encorva su torso y con el dedo (no sé cual) tantea sus carnosos labios para después mojarlos con la lengua. Lo que en un principio fue un alardeo se transforma en un verdadero deseo viril: una incontrolable erección asecha de golpe mis holgados pantalones. Se da cuenta de ello y augurando el final de la canción se quita, con una pasividad terrible, la pudorosa blusa. Se me echa encima y caemos juntos en el sillón. Nos damos un sudoroso beso, sintiendo yo unos globos pesados sobre mi pecho. Con el conocimiento escueto de anécdotas universitarios pongo mis manos sobre su suave mollera y delicadamente la empujo hacia abajo. Ella, presintiendo lo que viene, se deja de rodeos y me abre con habilidad la bragueta. Succiona con lujuria lo que mi madre me tenía prohibido tocar. Mis espasmos son incontenibles. Jadeo, con la felicidad de quien ha recibido un millón de euros. Concluye su labor con una larga convulsión mía. Me besa lo que queda de aquella dura y firme excitación, y se vuelve a sentar sobre mí. Prende un cigarro y me convida su humo diciéndome al odio:

-Ya ves corazón como si puedo imitar a mi mamá. No es tan complejo ¿la siguiente semana a quién quieres que caracterice, he, cochino fantasioso?

No lo pienso dos veces y le digo:

-Quiero que seas mi madre.

El apagón: [U:klaios]

Las luces del pequeño apartamento se extinguieron violentamente, así como las de la calle y las del edificio de enfrente. Una mancha púrpura apareció detrás de sus párpados en el momento que se diluyó la luz del televisor. Armando Valbuena se asomó al balcón, esperando verificar si en efecto toda la zona compartía con él aquella falla eléctrica. Al ver la avenida a oscuras, sumergió su mirada en el horizonte caraqueño, y vio las laderas del Ávila sumidas en una oscuridad huérfana de la luz eléctrica, pero que, bañada en la luna llena, se extendía hasta donde se perdía la vista.
Mientras los ojos de Armando olvidaban las imágenes del televisor y las luces de las lámparas, pudo sentir como la luz de esa inesperada luna acariciaba con más intensidad las riberas lejanas y las faldas de la magnífica montaña que su mujer había amado tanto.
Se sentó en la sala esperando pensar en algo para matar el tiempo, que parecía negarse a avanzar. Recordó aquellos saqueos durante el último apagón de esa magnitud. Recordó los motines y los heridos, muchos de ellos saqueadores que al ser reducidos por la policía, parecían convertirse en víctimas inocentes de una broma de sus destinos.
Pero la noche le susurró, diciendo que no era una cualquiera. Que era especial, que era extraña y vengativa. Que el apagón no era sólo producto de la sistemática ineficiencia de una empresa de electricidad, sino que era algo más. Algo cuyos sentido y esencia parecían eludirlo, algo que lo involucraba pero al mismo tiempo no podía controlar. Irrumpió en sus elucubraciones la estrafalaria noción de sobrenaturalidad que parecía sugerir que esta noche sería distinta.
-Nunca más solo- se dijo.
No podía ordenar y pronunciar lo que creía debía decir. Se agolparon sentimientos, recuerdos y palabras detrás de su lengua, atados con un nudo que le hacía sentir como se arrugaba en su pecho lo que quedaba de su alma.
El recuerdo de su esposa e hija, su amor por ellas parecía fundirse con el odio incandescente que sentía por los salvajes que habían acabado con sus vidas. Se sentía más muerto que cualquiera.
En aquel momento, sentado en el cómodo sofá de su impecable sala, rodeado de la más absoluta oscuridad, pudo darse cuenta que el apagón había alcanzado algo más que las luces de su pequeño apartamento.

La experiencia[U:cadur]


Cuando la vi pasar, no pude evitar que tristes recuerdos que tanto me habían costado borrar, reaparecieran, reminiscencias de un tiempo pleno de sufrimiento, dolor y decepción.
Cuanto desencanto y llanto pudo ella causarme en esa ya lejana tarde lluviosa y gris, cuando con un simple pero contundente, “terminamos”, me apartaba de su camino.
El corazón partido, el alma devastada y la mirada ausente, fueron fieles socios de la desesperación y la angustia, que por ese entonces eran las únicas y exclusivas sensaciones que acompañaban mí sin sentido viaje por la vida.
Que no intente por recuperarla, la llame, la busque, le escribí, le suplique, la amenace, lamentablemente era muy joven, utilice todas la armas prohibidas, esas armas que hoy a la distancia, un hombre de experiencia no usaría para conquistar o reconquistar una mujer, esas armas llenas de impaciencia, celos, agresividad, obsesión, armas vacías de amor, comprensión, tiempo y picardía.
Cuanto hubiese dado en ese momento por tener la fórmula perfecta, la receta inequívoca para recuperarla, para que volviese a mí, para volver a tenerla en mis brazos aunque sea, por una vez más.
Siempre creí que la vida era injusta, que nos llenaba de conocimiento y sabiduría cuando ya no la necesitábamos, que nos daba el don de la sapiencia demasiado tarde, cuando ya no podía ser utilizada en momentos cruciales para efectivas resoluciones, siempre pensé, vida, que eras injusta, siempre, hasta recién, cuando la volví a ver después de casi veinte años, gorda como una vaca, con los brazos anchos y arrugados como un bandoneón, con los pelos quemados de tanta tintura, con esas piernas, con esas piernas indescriptibles, inenarrables, ¡ay por Dios!, que terrible castigo habran tenido que pagar esas pobres piernas para terminar en ese estado calamitoso.
Tengo que reconocerte vida, que estuve equivocado, muy equivocado contigo, no pude entenderte, lo siento, fui muy injusto, por eso te pido disculpas, y te agradezco y te doy las gracias, por ser tan divinamente sabia.

Texto agregado el 08-09-2009, y leído por 1512 visitantes. (16 votos)


Lectores Opinan
28-10-2009 mmmmm.... muy buenos todos me cuesta trabajo elegir uno pero bueno me gusto la narracion ¨La mariposa azul¨ merlin_isis
03-10-2009 esperen falto yu!! jajajaja mi supervoto es para : "Jugar a vivir" voten por este o ls matoa todos1!!! jajajjajajaja jujuju be buenas historias me hubieraguratdo poner la mia jijiji pero no!!!! voten voten eso!!!! leunam
01-10-2009 Después de leer los votos descubrí que el mio es el más malo....¡¡¡ni un votico!!!! snif JUGAMA
30-09-2009 voto por "mi sueño contigo".. suerte a todos son muy buenos sus textos. gato_naranjalili26
29-09-2009 1 voto para Reggaeton Demente Zambombo
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