Parecíamos dos locos bailando bajo la lluvia solo nos cobijaba el reflejo de la luna. Altanera y envidiosa el agua de la laguna celosa se agitaba deseando nuestra fortuna. Y tomados de la mano no dejamos senda alguna, recorrimos enamorados los caminos y las dunas. Florecieron primaveras tras nuestros pasos; sin duda, no venciendo los inviernos la pasión blanca y pura. Muy felices partiremos bailando bajo la lluvia escribiendo en hojas blancas nuestros besos con la pluma.
Texto agregado el 03-09-2009, y leído por 297 visitantes. (13 votos)