Como cada día,
Hoy miro al espejo.
Hoy tengo, nuevamente, dos opciones:
Decirte que te olvidé
O llorar porque te amé.
Seguir viendo las estrellas
O seguir amándote, sin que estés.
Reclamar la falta de sueño
O continuar besando tu sombra.
Aprender a amarte,
Tal como tú lo hiciste
O sufrir porque fuiste
Todo lo que desee un día.
Desearte un feliz viaje
O naufragar de pena y dolor.
Aceptar que se acabó el amor
O sobrevivir de una fantasía.
Intentar derrribar muros
O continuar con los ojos del pasado.
Reír por tu ausencia
O seguir invisible a tu aliento.
Recobrar mis sentidos
O arrancarme los oidos,
Por no escuchar tu voz.
Comenzar de nuevo
O reprochar tu indiferencia.
Escuchar mi corazón
O seguir muriendo lentamente
Y en el silencio.
Disfrutar cada momento
O subir al caballo de la locura.
Lamentarme por el amor de mi vida
O aprender y caminar.
Intentar escribir un poema
O gritar, sin aliento, que aún te amo.
Lamentarme por lo que nunca quise
Y por lo que no esperé
O llenarte de luz.
Decirte adiós
Y agradecerte por cruzarte en mi camino
O simplemente...
Pedirle a Dios
Que te siga bendiciendo