Aqui estamos contigo Carlos, despidiendo solo tu cuerpo enfermo, porque tu memoria, tus actos, tu entrega, resonará cada dia en nuestros corazones. Si hubiera sido posible la magia, te hubieramos podido mejorar tus huellas heridas de una enfermedad avasalladora y ya sin nombre, pero no se pudo hacer más... luchaste por levantarte, demostraste tus ganas de vivir y eso nos conmovió cada dia. Pero no puedo dejar de expresar ahora en este lugar frente a tu familia y amigos que te acompañan, la sintesis extraordinaria de tu vida: siempre fuiste un amante de la justicia social, luchaste por los derechos de los otros, fuiste buen padre, dedicado de cada detalle, asumiendo tambien el cuidado y orientaciòn de tus sobrinos y de mi hijo mayor tambien, lider de los movimientos sociales y pastorales, buen amigo, leal a tu compañera, buen hermano, buen hijo, consecuente a tus principios, todo eso y muchisimo más, en un caracter como el tuyo, tan unico, tan extrovertido, hiperquinético y alegador, que a más de alguien le inquietaste su alma, hacen de ti, el hombre màs especial, unico y conocido por todo tu entorno. Quizas, por tu manera de ser y la sed de dar, se te olvido de preocuparte de ti mismo, son solo personas como tu que no temen enfrentar las consecuencias, porque viviste intensamente todo lo que tu mente y corazòn te hablaban y dirigian tu accionar internamente. Fuiste amante de la coca cola, el cigarro, el diario, la buena comida y el vinito que acompañaba la mesa, las noches eran dias para ti, el visitar a tus vecinos y echarle un vistazo al ambiente de afuera, eran tambien tu alimento y bebida cotidiana. Solo eras tu, que al solo un llamado de auxilio, no importando la hora, te ofrecias genuina e incondicionalmente a dar tu mano. Cómo no agradecerte particularmente la ayuda y cariño que me brindaste cada vez que lo necesitaba, me ofreciste techo, trabajo, tu orientación, tu mano para proteger a mi hijo mayor, al apoyo unico cuando supiste que esperaba a mi amado David...A mover los hilos de la familia, a ser mi hermano de por vida. Yo hoy me presento ante el aura que siento en este lugar, para gritar a voz fuerte que nunca, nunca Carlos Jiménez te olvidaremos y que siempre te amaremos desde lo más profundo de nuestros corazones aun vivos, aun latiendo, somos todos nosotros que hoy nos ponemos de pie y te aplaudimos te damos gracias, infinitas gracias. |