Dejarse llevar por palabras sin sentido
envueltas en halo de rima, de verso
de cadencias sinuosas
enajenando sueños, deseos
angustias o simplemente
requiebros.
Llenar de garabatos
blancos espacios libres de impuestos
que simplemente exponen
cual virgen pura
su potencial sublime
de generar en un “sin tiempo”
la perfecta armonía
de una obra maestra.
Olvidar ese sentido
el sentido único
la capacidad preciosa
de llevar en un suspiro
a tantas mentes navegantes
al crisol de la libertad.
Y poder dibujar
desde un silencio profundo
el camino gozoso
de la vuelta al Gran Silencio,
esa es la finalidad.
Texto agregado el 14-08-2009, y leído por 112
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