Atravieso sin pisar El puente de cristal Que nos une y nos separa. Como alma que huye etérea Me uno a ti en el eterno Paraíso de los sueños. Reconociendo tu piel, Ahogándome en tus ojos Oscuros de sirena. Mojándome contigo en una playa todavía sin nombre que se me escapa. Siguiendo la estrella del norte Navego como Ulises En busca del Itaca Donde tú habitas.
Texto agregado el 12-08-2009, y leído por 105 visitantes. (1 voto)