EL UNIVERSO EN UNA COCINA

Yo la he visto cabalgar sobre dinosaurios,
volar entre delfines, y ahogar sus despojos
en el fondo de una lágrima,
bajo la inmóvil luz de la luna.

Yo la he visto arrugar el entrecejo de su balcón
con el adjetivo hediondo,
y temblar como una crisálida
cuando escucha el sustantivo mujer.

Yo las he visto a Calíope y a Erato
encender las hornallas con un par de frases
para entregarse a un frenesí de verbos
y hartarse con mermelada de nubes

Yo la he visto esconder entre camisas y corbatas
(justo en el cajón del medio)
oníricos recuerdos
y rimas desvergonzadas

Yo la he visto transformar su patio
en una fragilidad de glaciares,
y malvones y caléndulas
en un festín de pájaros fastuosos

Yo conozco esa casa….
¡la he sentido gritar preposiciones
y adverbios de memoria, y hospedar
paisajes y valses antiguos!

Funcionarios grises aducen misterios menores
de inasibles duendes y fantasmas

Yo conozco esa casa…
y su secreto:
(pero no se lo cuenten a nadie)

En esa casa habita un poeta.