Los Mitómanos y la Gloria
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I - PREFACIO

La Historia, cuyo crisol es el tiempo y cuyo material son las almas, tiene también, como el día, sombras y refulgencia, cenits y azimuts y grandezas unas veces efímeras y otras tan presurosas como fugaces.

La Historia, Gran Dama sofisticada e ilustre, en ocasiones se viste de damisela y luce, en medio de la basta adulación de las masas, los atavíos altisonantes y variopintos del folletín.

Entonces, lo que fué drama se vuelve melodramático, lo trágico, tragicómico y detrás de la carcajada se ocultan, acechantes, el llanto de angustia, el gesto de rebeldía y el rictus desafiante y amargo del desdén.

En ese tinglado sempiterno de la realidad donde se dramatiza, a ritmo de farsa o sainete el libreto cambiante y caótico de la historia, los imperios, villanos quintaesenciales, han usurpado, a fuerza de invasiones, despojos y masacre, el rol de protagonistas.
Una vez que los vendavales cíclicos de la Historia los fuerzan a hacer mutis por el foro dejan el campo de batalla de la historiografía sembrado de héroes y mártires, protagonistas y coprotagonistas lacerados, malheridos, desfallecientes y - a veces - moribundos.

Entre estos se destacan, en la creciente unidad de cuidados intensivos de la realidad objetiva, dos ilustres guerreros, unas veces vencidos, otras veces cautivos, pero siempre en lento proceso de recuperación: La Verdad, y el pasado de sus víctimas.

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Nada ilustra mejor todo lo expuesto hasta ahora, en este prefacio, que el tratamiento dado por el gobierno de España, en medio de una impunidad aberrante y vergonzosa, al Archivo Real de Indias.

Más que el oro, más que las narigueras y gargantillas de plata, más aún que los ídolos y las vasijas de barro o la sangre de nuestros héroes, mártires y próceres (algunos de los cuales fueron - en realidad - más viles que los villanos) nos duele el secuestro y despojo continuado de las fuentes, registros y documentos de nuestra historia y nuestro pasado que continúan, obscena y descaradamente, a buen y tenaz recaudo del invasor.

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II - BOLIVAR, MIRANDA, SANMARTIN Y OTROS MITOMANOS LEGENDARIOS.

Continuará