Esa muerte, cada vez más cercana.






















C. Fernández Rombi
arqcaf@yahoo.com.ar

Ayer cumplí los veinte, mis viejos me dieron un beso antes de irse a una de sus fiestas y mis hermanos Rosmary y Axel ni recordaron el magno acontecimiento, cuando se fueron pedí una pizza y con la tele fueron mi único festejo… como si hubiera algo que festejar. Siendo la vida el plomo que es, cumplir años es una decepción más entre otras tantas que se van escalonando año tras año. Fracasé en la facultad y fracasé en el amor, primero con Mariángeles que después de un año me reemplazó por otro, seguramente mejor, fueron dos años duros y tristes y luego me enamoré de Ferchie, mi amigo desde chicos y de una familia como la mía, soñé por un tiempo ya que me parecía que aceptaba bien mis insinuaciones… fue sólo loca ilusión, cuando le hablé abiertamente primero se asombró y luego se largo a reír reír reír reír como un poseso hasta las lágrimas cuando concluyó me dijo que me dejara de joder que yo no era un puto y él menos, el único consuelo que me quedó era volar volar volar volar; para la hierba y los demases de la vida no tengo problemas ya que en casa lo único que sobra es plata; el cariño y el afecto nunca formaron parte de la familia; antes de irse mis hermanos se burlaron de mí al decirles que los viejos se habían ido a un fiesta ya que según ellos es cierto que se van de joda pero cada uno a la propia … ¡iluso! Ya en la madrugada estoy podrido de la tele apago y me fumo tres porros al hilo se siente bien aunque pienso que la mariguana ya es poco total… ¡es igual! Todo es igual a todo, igual a lo anterior e igual a lo que vendrá el verdadero final sólo tiene un nombre…
Mi viejo me retira de mi segunda internación en General Rodríguez, treinta días sin droga aseguran que estoy curado pero yo estoy desesperado me contengo para que no se note, mientras maneja me larga una perorata interminable acerca de que me cuide de que me voy a arruinar la vida con tanta porquería y sobre todo de lo mal que lo hago quedar antes sus amigos y los asociados de la Empresa la Empresa la Empresa la Empresa… de la mierda sobre las seis de la tarde llegamos a nuestra casa de Barrio Parque ni mamá ni mis hermanos y él que me dice al irse: bueno cuidate mucho che yo me tengo que ir decile a la cocinera que te prepare algo de cenar ya que hoy vas a estar solo chau chau chau chau me encierro en mi cuarto y busco en mi biblioteca detrás de las obras completas de no se quien… ¡Ah… me estoy poniendo a nivel! ¡Por fin! Por fin por fin por fin por fin… Es domingo y cumplo los veintidós, despierto pasado el mediodía la boca pastosa y el pulso acelerado acelerado acelerado acelerado muy acelerado; voy a la heladera y me tomo un litro de agua de un solo trago veo la nota: Luis Alberto nos vamos a la cabaña venite que voy a hacer un asado por tu cumple Papá. El teléfono comienza a repiquetear lo descuelgo sigue mi celular lo apago pienso que hace un montón de horas que no como nada, abro otra vez la heladera para qué para qué para qué para qué, si no tengo hambre lo que quiero me espera arriba, en mi cuarto y allá voy… ¡Ah, que bien se siente!
Quiero más quiero más quiero más más más más… ¡Lo quiero todo de una buena vez!