PERMÍTELE SEÑOR QUE TRANSITE POR LOS CAMINOS DE SU INFANCIA QUE AÑORABA: QUE VAYA AL CALLEJÓN CERRADO VECINO A SU CASA CON PERSONAJES PINTORESCOS DE MIL HISTORIAS QUE ME RELATABA; QUE POR MÁGICAS VEREDAS DEL BOSQUE SE DESLICE SIN FATIGA EN SUS PATINES COMO EN SU NIÑEZ Y QUE COMPARTA LA COMIDA FAMILIAR DOMINICAL CON LOS QUE SE HAN IDO. SE BENEVOLENTE Y REÚNELA CON SUS AMORES, LOS PRIMEROS Y LOS ÚLTIMOS; Y DALE LICENCIA DE VISITAR LOS SITIOS DE SU CORAZÓN: LA FUENTE DE TREVI, SAN GIMINIANO DE LAS BELLAS TORRES Y ASÍS QUE RECORRÍA CON SU IMAGINACIÓN Y A LOS QUE NO PUDO VOLVER EN VIDA. DEJA SEÑOR QUE VUELVA A PROBAR EL HELADO DE LA BOTELLA DE ORO A LAS ORILLAS DEL SENA Y LA SOPA DE PAN EN EL MERCURIO DE NÚREMBERG Y SOBRE TODO, TE PIDO HUMILDEMENTE QUE CUANDO YO LLEGUÉ ME RECONOZCA. AMEN
Texto agregado el 08-08-2009, y leído por 109
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Lectores Opinan
08-08-2009
El Señor permitirá todo eso y ella sí que te reconocerá ,el dolor nos procura desahogos en bellas palabras como estas , un abrazo =( mis cariños dulce-quimera
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