Te descubro... sin querer pero queriendo
con paso vacilante...
en el prematuro despertar de una flor,
con pasos ardientes,
con tu boca que juega al despiste;
con mi boca de roja pasión
te descubro.... y sé que emanas el brillo
de la aventura placentera y prohibida,
me seduces, y es inevitable traicionar
a la cordura,
me invitas a pecar como un sacrílego
en frases sin palabras pronunciadas,
en intenciones de una causa y un efecto;
te descubro con la copa llena... y
beber quiero sin temor a enloquecer
y con tus mieles...expiar mi agonía,
Te descubro... nervioso, pero desafiante
intentando escapar sin prisa
de la trampa que ha tejido el destino
y descubro... que compartes mi agonía
tan sólo un paso y ya no soy nada
y descubro... que mis flechas han hecho blanco
en el marfil de tu sonrisa,
tímida...pero atrevida
exultante... pero precavida
y estas en mi mente con palpitantes recuerdos
jugando a ser mi elegido,
otra vez...te descubro como ayer.
Te descubro...como queriendo evitarme
pero es mas fuerte la ley del amor
no se puede evitar lo que ya está escrito,
no se puede olvidar... lo inolvidable
no se puede suplicar olvido,
sino existe la intención de olvidar
te descubro como siempre en un rincón
aparcado en el torbellino de mis pasiones
y te descubro igual que ayer... no
... con más intensidad
y ahora surgen de mi corazón como borbotones
rios de tinta enamorada,
Te descubro...
como arquero sin sus flechas,
indómito como el primer día,
dime como has conseguido dominar mi alma
sólo basta caer en tu mirada y ya...
ya no soy nada.