Voy marchando despacito, a mi casita de luz
para estar cerca de tu alma, de tu piel, de tu amor.
Es que la tardecita se mantiene hermosa,
calentita, para otro paseo por el parque,
como es la estación fresca, primaveral.
Un rayo de sol, filtra tu mirada
se que me ves, como yo te miro,
grito tan fuerte, que te llega el sonido
mi querida arañita, no te tires, del tejado,
si yo no quiero matarte, solo a verte me he quedado.
Si estas dispuestas a no picar, yo me voy,
y tú te enredas, con esa mariposa que te revolotea.
Vamos con tus patitas de café serás una ardilla
Apresúrate, que te hacen cosquilla sus alitas,
no la comas… solo trepa a sus alas y vuela, y serás
como ella, suave dulce y bella.
MARÍA DEL ROSARIO ALESSANDRINI.
|