El pelo de la mujer dentro del agua
Es verde y logra un rápido erizado.
Y la fuerza de la corriente
Deja una ondulación latente.

La temperatura del mar sube
Y los rayos solares no menguan
Y en desabrigada profundidad
Dejan al descubierto, una mujer
Acunada en una frágil suspensión.

Una ballena sin cuidado la sorprende,
La revolea, la desviste, la arropa y la despierta
Al paso con su canto cegador.
Y recuerda un momento feliz de la vida,
Antes de que el lobo la halla querido devorar.

La sibila escapo al mar
De un futuro sombrío
Y piensa en la belleza del rey sol
Inconsolable, porque no es el mismo calor
Del abrazo en la gleba
Que en el ponto.