LA NOCHE
La vida se le escurre entre los dedos,
cada rayo de sol es un puñal,
que desgarra su cuerpo oscuro y frío,
y la lleva a ese estado terminal.
Fue reina por unas pocas horas,
escondiendo entre sus ropas al amor,
ocultando las miserias de los hombres,
cobijando entre sus brazos el dolor.
Algún grito de horror le agregó miedo,
un gato que maullando se lamenta,
un “ te quiero ”, cansado y mentiroso,
de alguna mariposa que está en venta.
Amanece y el silencio se hace ruido,
ella ha muerto, la luz la ha devorado,
y en unas horas volverá a la vida,
porque; ¡ LA NOCHE !, habrá resucitado.
Abrirá los ojos cuando muera el día,
porque ese es su destino intermitente,
y en la alborada morirá de nuevo,
¡ Hasta el fin de los tiempos ! ¡ Para siempre !
Macema
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