¿Por qué me cuesta tanto encontrar ese abrigo que estoy pensando?, que me viste perfectamente al cuerpo, con mi espalda pequeña, y con mis brazos mas largos, que tiene un cuello perfecto para mi, que me abriga tan suavemente, que su color combina con mi piel, que vislumbo brillante en mis pensamientos. Será que es parte de nuestro pensamiento mágico, que te pruebas uno y otro y ninguno cumple tus necesidades, vas observando distintos modelos, distintos tamaños, y te das cuenta de los que si te podrían quedar bien y de aquellos que no, a veces tomas uno que pensabas que no te vendría bien, pero cuando te lo pruebas te das cuenta que si te va bien, y que resalta algunos detalles que te gustaban de tu figura y los adquieres. Mientras que con otros, no estas muy segura de si te pudiera calzar como esperas, y cuando te lo pruebas te das cuenta definitivamente que no te va bien, y que no es para ti, y vuelves a ponerlo en la estantería.
¿Qué pasa con mis relaciones? Voy observando a estos hombres, voy mirando y captando detalles que podrían venirme bien, su comportamiento especialmente, ese es el punto clave. Y algunos no tienen tan buen comportamiento, pero si podrían satisfacer otros puntos débiles míos, y podrían ajustarse a mi, y cuando los conozco, y me abro a la posibilidad de tener una relación mas cercana veo tantos desgarros en esos harapos que parecían nuevos y brillantes, que me bajan tanto las expectativas y me hacen huir rápidamente de ese hombre. Devolverlo a la estantería.