La fauna urbana

20 minutos llevaba en la parada del Ómnibus, y pasaban todos, menos el que él aguardaba.
A esa hora, las 19, todos los taxis pasan ocupados, y la mayoría de los buses siguen de largo, por estar repletos.
Mientras aguardaba, se puso a otear los alrededores.
Por cada ómnibus que circulaba, eran tres o cuatro carros sin luces ni señales.
En la esquina conversaban tres chorros, campaneando a todas las mujeres que pasaban.
Miraba los ómnibus, y en su interior, iban vendedores de todo tipo.
Ofreciendo desde Revistas viejas, hasta encendedores y cajitas de chicle a voluntad, bonos para comedores infantiles, hasta el lastimoso: - Soy el único sostén de mi Familia, con 5 hijos a cargo...
Pero todo estaba en orden, pues la seguridad ciudadana es lo primordial.
No importa si no se consigue trabajo, o no tenemos dinero para comer.
La Seguridad debe ser el punto fuerte del Gobierno, así que dos agentes por esta acera, dos por la de enfrente, y, dejando una cuadra libre, repetimos el mismo esquema.
Mientras los chorros, que ya están sobre aviso, se dedican a asaltar y rapiñar, lejos de las miradas de los elegantes representantes de la Ley.
Cada cinco minutos pasa un Bichicome, o algún joven mal entrazado.
"Si estos pichis fueran ómnibus, no tendríamos las paradas llenas, como ahora, y el transporte público, sería un medio ideal de desplazarse por la Ciudad.
Además, con tantos buses, siempre viajaríamos sentados.
Y las Compañías de autobuses, verían aumentar considerablemente la venta de boletos, pues al reducirse el lapso de espera, el medio sería más usado...".
Entonces pasan dos muchachas jóvenes, que le sonríen al Flaco.
Bien descaradas, lo llaman:
- ¿No tenés un cigarro?.
- "Sí, sírvanse...", una agarra el paquete, convida a la otra, y se lo guarda.
- ¿Tenés fuego?,
- "¿Qué?, ¿me querés afanar el encendedor también"?.
- Paraa, que nosotras no somos chorras, chee!!!.
¿No nos conocemos de alguna parte?.
- "Es seguro que no".
- ¿Porqué decís: es seguro que no"?.
- "Porque yo no voy al quilombo".
- ¿Que decís, nos está tratando de putas?.
- "Nooo, si ustedes son dos Vírgenes que recién vinieron al Mundo. Andaaa!!!.
- ¿Porqué no te vas a la P...?.
Y el Flaco pensaba: "Solamente yo, les doy bola a estas locas...
Me piden dos puchos, y se quedan con la cajilla. Después quieren el encendedor..., si les doy la hora se quedan con el reloj. ¡¡¡Que vayan a laburar!!!.
Bueno, es un decir, porque están laburando, ¡pero que no me agarren de punto a mi!!.
Yo quisiera un Montevideo mejor, para sus habitantes..., como el de antes.
Donde se pudiera transitar por las calles, sin llevar la mano en el bolsillo, agarrando la guita.
Cuando las Mujeres andaban por todos lados, con la plata en un monedero, y a nadie se le ocurría arrebatárselo.
Los muchachos no se daban la papa, y cuando tomaban, si se sentían mareados, se iban a dormir.
No enchastraban ni buscaban camorra, y mucho menos con los Mayores y los Viejos, porque eran intocables, y los Jóvenes les debían Respeto y Obediencia.
Pero hoy, si vienen dos o tres muchachos, y te piden para el Vino, dales, y dales todo, porque si no les das todo lo que tenés, te cagan a palos, y si te revelás, te meten un chumbo, y para que no jodas más, te rematan.
Aunque no lo tengo claro, las reglas del juego urbano, cambiaron, y no precisamente para bien.
Los Jóvenes son los Líderes de las Sociedades del Futuro, lamentablemente muchos quieren acortar caminos, imponiéndose por la fuerza, y la fuerza es un instrumento de los incapaces y los ignorantes, que, a falta de Talento, obtienen efímeros logros, por esos medios.
Hay un solo camino que conduce al desahogo económico, el bienestar y los bienes terre-nales.
Este comienza con el primer paso que damos, hacia el respeto a la Ley y el Orden, y pasa por el Trabajo, el Sacrificio, la Humildad; aceptar nuestra condición vital, para ir mejorándola con nuestro Esfuerzo y nuestro Tesón, en base a Honestidad y Decencia.
El Camino de la Vida, para la mayoría de nosotros, es largo, y nos brinda un sin fin de oportunidades, que debemos descubrir y saber aprovechar, sin dañar ni hacer sucumbir las posibilidades y esperanzas de los demás".
Una brisa del Sur, comenzó a congelar al Flaco: "Mejor me dejo de filosofar, y me tomo un taxi, porque este ómnibus ya no viene..., y los tacheros también tienen derecho a morfar, cheee!!!.


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