Roto como un par de zapatos viejos descartados en algun rincon oscuro. Vacio como la botella de ron que nos bebimos en una noche de parranda. Frio como el cadaver exquisito al que todos lloran sin conocer. Bello como la luna llena sobre el mar los poemas de Rimbaud los besos de los amantes en los parques. Ardiente como los fuegos que arrojan las molotov la fiebre que consume lentamente o la pasión comunista. Leyenda. Derrotado una y otra vez sin renunciar jamás a la victoria.
Texto agregado el 13-07-2009, y leído por 150 visitantes. (1 voto)