No hay razón posible que le quite de la cabeza esa mirada apacible "Estamos bajo el mismo cielo no importa si no alcanzo a tocar tus manos" creo. A un recuerdo efímero fuerte aferra sus brazos al frío aprieta en llantos rosados. No hay razón para olvidarse de esa conversación inversa de la risa franca, honesta. No olvides, contente, solo un poco más niña aún no llueve.-
Texto agregado el 09-07-2009, y leído por 233 visitantes. (4 votos)