A FRANCISCO DE ASÍS
(Soneto alejandrino)
¡Seráfico Francisco, que eras todo bondad,
Con el “hermano hombre” y el “animal hermano”,
Que buscaste ser siempre instrumento de paz,
Y que, al pobre, tendías, generoso, tu mano…
Que, donde había odio, ponías caridad
Y donde había ofensa, tu perdón de cristiano…,
Que iluminaba errores, tu amor a la verdad
Y alegraba tristezas, tu corazón “humano”…!
¡No es malo este momento, para imitar tu vida,
Aliviando a los hombres, su desesperación…,
Para querer ser bálsamo que cure tanta herida,
Para ser sembradores de amor y de perdón...!
¡Que el mundo necesita, gentes a tu medida,
Generosos creadores de “nueva redención”!
EMILIOSALAMANCA
6 Julio 2009
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