- ¿Cuánto es una vida?...
- Para mí, la vida son tres días
- ¿Tres días?
- Ayer, hoy, mañana. No somos nada sin pasado…
- No somos nada sin presente
- No somos nada sin futuro
- No somos nada sin presente
- ¿Eh?
- Para mí, la vida es un día ¡qué un día! un momento, un segundo, ¡un milisegundo! para mi no hay pasado ni hay futuro, el pasado fue, el futuro aun no es… ¡el presente es!, ¡está!, sin presente no recordarías, sin presente jamás proyectarías tu vida, porque… ¡porque ni siquiera existirías!
- ¡Pero qué barbaridad! ¿Reniegas el pasado de todos?, ¡¿reniegas el futuro de todos?!
- Yo creo que este momento es el único que tienes y no vale la pena preocuparse ni lamentarse por nada… ¿notas a que me refiero?, no vale la pena vivir en un futuro imaginario o en un pasado que también existe sólo en nuestra cabeza pues estaríamos dejando de vivir la vida real… que es una cosa maravillosa que conjuga en cada fragmento de tiempo infinitas variables, pero somos nosotros quienes finalmente decidimos nuestra vida, a cada milisegundo.
- ¿No crees en el destino?
- No
- ¿la casualidad entonces?
- No
- ¡Vamos! ¿no crees en nada?
- Creo en la vida
- La vida está hecha de pasado
- Eso depende de cómo la creas
- Yo la creo como un producto de las acciones pasadas
- ¿Y entonces cómo podrías cambiarla?
- Actuando para modificar el futuro
- ¿Con ese fin?
- ¡Claro!
- Y entonces, si llegases a modificar ese futuro… ¿cuándo lo vives?
- Cuando llegue
- Cuando llegue no será futuro, sino presente
- ¡Oh!
- ¿Y qué haces tú en el presente?
- ¡Oh! Yo… ¡modifico el futuro!