Me canse de esperar un mañana mejor
de esos que Hollywood pinta de maravilla
en donde rara vez la muerte aparece y
los felices para siempre están al por mayor

Me canse de ocultar las cicatrices que viven
muy dentro de mi piel, las que hicieron
con discriminación, asesinato y maltrato
heridas tan grandes que ni toda la ciencia
logra que la sangre deje de fluir.

Me canse de las promesas de repertorio
que se recitan para sosegar la rebeldía
unos ofrecen un paraíso adornado de encanto
otros ofrecen equidad en un mundo desigual

Me canse de las fábricas de fantasía
con sus pócimas para tener mil máscaras
te venden hasta embotellada la melancolía
y qué decir de los que ya ostentan tú único espejo
de sombra mortuoria cavilando por el río

Me canse de hallarme en las soledades y el frío
cuando lo único que anhelo es perderme en su regazo,
sin direcciones al tormento o al llanto, para ser
reflejo extraviado de esta sombra que es mi Natura.

Me canse de las eternidades y su perennidad
porque sólo somos un soplo, una mirada,
un leve parpadeo en este fluir constante
que desprende un instante sin inmortalidad.

Me canse de los fantasmas que merodean
mi ventana, sus mirada congelan los cristales
que protegen el alma.
Ya son muchas las noches que paso despierta
con reflectores y luciérnagas a mi alrededor,
ya son muchos los días que porto escafandras
con tonos afligidos y ausentes de color.

Me canse de soñar imágenes que habitan
en mi interior. Prefiero visitar mis sueños
cada que la magia despierte, para hacer de mi
más que realidad un poco de fantasía
y no por eso ser prisionera de la apariencia o la mentira.

Me canse de cansarme…