Caracas, 24jun del 2009.

Mi querida Asia, que tiempos fueron esos los que ambos disfrutamos de una forma u otra…
La verdad tiene toda la razón de decirme lo que me has dicho, lamento verte causado tanto daño, jamás pensé qué me amaras como lo hiciste. Nunca me lo imagine... Ahora el tiempo me ha enseñado. Veo las cosas distintas a aquellos días.
Cuando andaba contigo mi querida Asia, siempre me lo tome como una aventurilla más, antes de casarme y poder disfrutar la soltería que poseía en esos momento, te convertiste en la niña hermosa de mi vida, también desee quedarme contigo; ¡Pero eras tan joven!. No te veía un futuro junto a mi, ya ¡Yo! era mayor y tu apenas comenzabas la vida, disfrutabas de todo, sonreías de los más mínimo que te sucediera, ayudabas a los que amabas, te encontrabas en esa fundación de protección civil, donde te enseñaba primeros auxilios a todos los del desastres de la lluvia, tu gente más pobre de tu tribu podía contar contigo, ellos sabían que cada madrugada que fueran por ti, tu estarías allí. Y saldrías a la selva sin pensar en nadie más. ¡Sólo ellos!.
En aquellos los que el rió que se llevaba con sus chozas e hijos, eres una reina digna de tu tribu…tus padres hicieron lo mejor por su gente. Dejándote a ti a cargo.
Claro estas, que tus estudios aquí en la Capital, hicieron que te convirtieras en una mujer más astuta para los negocios y actividades de tu pueblo.
No puedo presumir que una niña hermosa como tú, se convertida en una Diosa monumental,..Perdiste tu ingenuidad, sencillez y lo que es peor es que yo fui el culpable de esos cambios...No me lo puedo perdonar.
En estos últimos días de mi vida, postrado aquí, solo me tortura tu recuerdo. Me hago mil preguntas, que quedan al azar :¿Que lindo hubiera sido mi vida junto a ti? ¡Quizás me habrías cambiado la forma de pensar, así lo qué te rodeaban! Es probable que mis días de vejez serian mejores a tu lados?. Se qué es demasiado tarde….Aunque Dios dice que nunca es tarde para arrepentirse, pero las calles que recorrimos a escondidas, jamás volverán a ver mis pies junto a los tuyos.
Recuerdo en mis horas “aquel día”, en que te conocí, esa tarde tan brillante de luz, después de haber llovido todo un día, toda las personas junto al la orilla del rió, que daban gritos desesperados porque no sabían como actual, con la situación que veían. ¡Yo ¡como todo un desconocido de tu rivera, andaba por allí, trabajando en la obra civil, que me asigno el Ministerio de estructura junto a tu comunidad, esa Obra comunicaría a las persona de un lado a otro. De repende toda la gente decía: se va ¡ahogar! se va ¡ahogar! , era un niño que jugueteando se había resbalado al rió crecido por las lluvias, la mujeres sólo gritaban y gritaban, hasta que mis ojos vieron las piernas más blancas qué hubiera visto en mi vida , sobre todo en una costa donde todos eran de “color”, una melena hermosísima , que te cubría todo el torso de su cuerpo, tomabas una liana en tus manos, que sobre salía de lo más alto de la montaña rocosas, estabas rodeada de aquellos hombres que parecidos caníbales, en guayucos y lanzas en mano…
Mis ojos no podían creer lo que veían. Cuando te lanzaste como toda una experto sostenida de la liana y dando varias vueltas en el aire, hasta hacer un perfecto clavado, parecías volar como un ave, hasta perderte por completas dentro de las aguas amarillentas del rió ya el niño no permanecía en la superficie del agua ya perdido sin deseo de vivir antes tanta adversidad, el niño renaces en tus brazos. Salías como una Diosas de las aguas dulce, imponente ante tu gente sin ningún rasguño, en tus partes, sosteniéndolo en otra orilla. Mi sorpresa fue tal, que no podía quitarte la mirada, eras increíble, tus hermosos pies estabas en el barro desnudos, se hundían hasta tus tobillos. Dejando ver joyas preciosas en ellos y tu gente media desnuda te seguía como si fueras una Diosa, de las mismas aguas…. Erguida como una pequeña dama sonreíste a los desconocidos que estabas en el puente a la perspectivas de lo sucedía. El guía constantemente nos indica , que no nos acercáramos a los indio de la región, pero mis oídos no podían oírlo , mi mirada se iba contigo, y allí mis sueños de posee a la reina mas bella de la localidad , auque fuera por unos pocos días……te perdiste entre los matorrales, hasta que volviste a mi; aquella noche, descalza de nuevo sin vestidos solo tu cabello cubriéndote el pecho y un guayuco tejido de moriche te presentaste en la reunió de la comunidad, donde daríamos información de la Obra y así poderle informa lo beneficios que les traería el punte entre las comunidades cercanas. Como siempre tus hermanos custodiándote tu espalda, luego nos sorprendiste ,defendiéndote como un perfecto castellano, antes nosotros, que pensamos que eras una ignorante de la civilización globalizada, nos equivocamos contigo. Discúlpame de nuevo.
Me acerque y te dije: ¿Te veré de nuevo?- Y me respondiste todos los caminos conducen a un sólo.
Días después… estabas en la feria y te invite a bailar….venias con un vestido con muchos colores, plumas en el cabello de aves exóticas, tus sandalias eran hechas a manos de una fibra natural, decoradas de flores locales, danzabas de un lado a otro con una hermosa sonrisa a los que te observaban seduciéndolos con tu carisma.
No pude; aguantar y me acerque. Bailaste conmigo mirándome a los ojos, sin preguntas, sin objeciones , sin reproches de ningunas de las dos partes, sin fronteras divididas por nuestra culturas .. En la noche...Me llevaste a tu lugar favorito, la cascada atrayéndome a lo profundo de su caverna y la luz que traspasaba el velo del agua, me embrujo y te bese, debajo de la caída de agua. Me enamore.
El constante acariciar del viento, en nuestros cuerpos, que se fundía en los minerales de la tierra…
Eso nos atrajo y no conseguido en la ciudad donde disfrutamos más uno de otro.
Ahora, que se que has vuelto a casa con los tuyo, siento un aliento de tranquilidad a mi desdicha.
Estos últimos años que no he sabido de ti, siempre mantuve la esperanza guarda en mi caja de Pandora, a ver si en algún momento los dioses de Olimpo. Me permitieran mirarte de nuevo como dos viejos amigo, que se reúnen de nuevo, en una reunión que jamás se dará…Serás, mi mejor recuerdo que mantendré en estos últimos días mientras plasmo mis letras para ti.
Está carta dará un gran recorrido por tus montaña rocosas, hasta llegar a ti. Pero llegara lo se, es mi aliento el que te escribe, suplicando tu perdón….
Como te conozco y si queda una pizca de esa niña inocente, se que correrás detrás de los tepuy con tus pies descalzos, y danzaras al viento, aves y los espíritus vendrán a ti, a secar tus lagrimas que derramaras en vano, por alguien que no supo apreciar lo que tenia. El gran chaman ha de venir del más allá, a socorrer a su reina que no debe ¡llorar!.
Por alguien que yace en su tumba que jamás caminara entre los vivos de la tierra mas antigua y desconocida del mundo.

Siempre contigo Tu ángel Z... Que no espera tu respuesta…si no en el mas allá.


Elisanne M, Zabaleta

24-6-09