ya esta aqui el final, apenas he tenido tiempo de escribir por lo que he tardado mas de la cuenta en publicarlo. gracias por haberme leido.

Los días pasaron rápidamente, shara finalmente terminó sus estudios, paco y Marian ya se habían separado, ahora cada uno vivía lejos el uno del otro. Esto le dolió más a shara de lo habitual, pero se sintió mas relajada, mas libre, ahora ya todo había cambiado. Suspiró al ver como iba a abandonar su ciudad natal, echaría de menos sus amistades, sus lugares de trabajo, su rutina diaria, le asustaba en parte cambiar de rumbo, pero sabía que todo saldría bien.

Preparó las maletas, organizó lo que llevaría, y se encaminó primero a la nueva casa de su padre, antes quería despedirse de el. La despedida fue algo dura, triste y nostálgica, estuvo una hora con el, escuchando por primera vez los sentimientos de su padre, el la quería, quería a su madre, pero habían sido demasiados años sin un amor de verdad.

_ solo quiero que tu seas feliz, que sea bueno contigo- le deseó besándola en la mejilla. Se despidieron con un fuerte abrazo y memorizó en su mente el rostro triste e incomprendido de su padre.

Acto seguido fue a casa de su madre, pero ella no estaba allí, como habitualmente solía estar, la encontró comprando algo de comida para la semana. Marian no había cabido que shara partiría aquella misma tarde, tomaron café en una cafetería cercana, hablaron como dos amigas, shara la observaba, esta era su madre, la alegre y coqueta Marian.

_ se que lo has pasado muy mal en estos años que hemos vivido juntos cariño- le dijo mirándola con una mirada que shara jamás había visto en ella, era una mirada llena de secretos- tu padre no me ha sabido hacer feliz, yo quizás a el tampoco, pero eso no significa que te vaya a pasar a ti.

_ no voy a casarme nunca mama- la interrumpió shara.

Mariam sonrió.
_ claro que lo harás, eres joven, dulce y madura- la tomó de la mano- se que Dylan te quiere, y sobre todo, tu lo quieres a el, sabréis daros lo que necesitáis el uno al otro. No tengas miedo a ser feliz shara, solo se vive una vez.

Shara la abrazó con fuerza, era la primera vez desde hacia mucho tiempo, que sabia que su madre, después de todo, y tras esa apariencia de mujer ocupada, se escondía una buena y maravillosa persona. Lloró sin que ella quisiera cuando cogió el tren para Madrid, su familia, su Córdoba, sus amistades, toda una vida allí…, ahora vería menos todo aquello.

Cuando llegó a Madrid, todo era ajetreo, ruido y cogidas rápidas de vuelos y trenes. Con el corazón acelerado, shara embarco al vuelo que la llevaría a Barcelona. El Móvil vibro antes de que despegara, era Dylan.

_ ¿cariño ya estas en el avión?- su voz era todo lo que ella necesitaba en esos momentos de cambios.
_ si, así es- suspiró felizmente- pronto estaremos juntos.
_ Si- la voz de Dylan parecía un torrente de emociones- no sabes cuanto deseo vivir ya juntos, me parece mentira que haya llegado el momento, te esperaré en el aeropuerto, te quiero.
_ te quiero- contesto shara con el corazón aun más grande.

Una sonrisa se dibujo en su joven rostro cuando el avión avisó:

_ próximo destino, Barcelona.