pato incrédulo es cortesía de un cuentero amigo quien, a raíz de su gesto, ha salvado este espacio que dio y seguirá dando satisfacción a mucha gente al pedo como yo. ¡Feliz día del peroné para todos!



Es lo que tiene el Tigre, Jorge. Te desenchufás de todo. Pescás un rato, te morfás un asadito y te tirás al sol. Sí, claro. Son todas pantallas, viste. Te meten el fútbol, la inseguridá, el dengue, la televisión. Viste, todo eso para tapar los tongos que se manda el gobierno con la guita del gil. Yo vengo acá y me olvido de todo, me olvido. Uy, mirá ese patito, qué loco. Sí, este ispa no cambia más. No cambia, che. Tirále un cacho de pan al pato a ver si viene. Epa, mirá cómo se hunde. ¿Vos sabías que el pato se hunde pero no se moja? ¡Eh! Es la naturaleza, jorge. Es lo que tiene acá, el Tigre. La naturaleza. ¡Pero sí, claro, mi viejo! ¡Los sueldos que cobran esos tipos! Hay que ver la guita que hacen, che. Yo por eso fin de semana por medio firme en el Tigre con la caña de pescar. Mirá el pato, qué bicho incrédulo. Ahí se metió de nuevo a ver si pesca una mojarrita. Sí, Jorge, incrédulo. No se puede creer un bicho que se meta abajo del agua y salga seco. Cuando sea viejo vendo todo y me compro una casita acá, en una islita del Tigre. Esto es tranquilidá, Jorge, impagable.