Ha las alturas de una mujer.

Es prudente ver una planta sobre otras cosas, ha todas las distancias ha sus horas disponibles,

Una vibración de metálicos sonidos
Un hechizo en su penúltima sombra
Varios hormigueos en la piel,

Desde aquí en esta vaga tierra
Donde hay minúsculos jardines de antaño combinando tiempo en tardes,

Hace mucho
Algo parecido ha despedida
Tuve un encuentro casual
Con los hechizos ojos del tiempo
Que tan solo las pupilas escondidas saben,

Al fin el divino mago del día llego
Con sus preciadas costumbres
Hechas de manos,
de rostros,
De caras.

Pero entre dos rocas póstumas en la orilla del mar
Me he encontrado con el viajero beso
De aquel que ha zarpado de puertos distantes,


El labio que mordía el aire
Sin prisa llega
Sin cortar distancias,
Sin tropezar con los absurdos
Sin invadir una sola hoja mustia,

Quiero escribir sobre la pureza del día porque decir encuentros,
Es casi engañoso
Prefiero el margen,
Ha toda línea trazada por el ego.

Pero hay letargos mudos que son igual a la belleza corpórea y desnuda
Porque no se presentan palabras
Cuales serán
Que
Que otros oídos atentos al absurdo,

Mudo y desnudo
Trazaba el arte de la vida
Sus manos llegaban
Calidas y precisas,

No me quejo
Porque
Todo en el entorno fue sed de caprichos
¿Y
Los encuentros
Son las distancias
Que nacen
En una suerte de sueños?

Juan_Poeta