El no hizo más que cerrar la puerta y mirarla. Estaba más bella que nunca. Juana,enojada, exigia una explicación sobre su tardío regreso.
¡No la hubo!
Felipe se había ausentado bajo cualquier excusa y desapareció por varios días. Juana comenzó a discutir,amenazar,y al último a llorar. Lógico que era todo inventado, pero Felipe no se daba cuenta.
Avanzó inseguro varios pasos,y ya frente a ella la tomó en sus brazos.Al comienzo quiso rechazarlo,pero luego secó sus lágrimas,que también eran fingidas y dijo:
"¡Bueno, no hay problema, te perdono, pero otra vez avisa cuándo regresas.Lo que está bien para ti, lo está también para mí...y dándose vuelta llamó:

"¡Pedro,amorcito,ya podés salir, es mi marido!"

...Felipe y Pedro se miraron aterrados.Ambos se conocían y estuviéron juntos en varias oportunidades;es más, eran amantes ocasionales entre sí y Pedro también amaba a Juana.Eso Felipe no lo sospechaba.En ausencia del uno,el otro consolaba a Juana.
Hoy de alguna manera la vida les jugaba una mala pasada.El pánico se apoderó de los tres...

Juana quiso huir.Corrió deesperada, sintiéndo detras suyo los pasos de ambos, que se acercaban peligrosamente.Por las caras desfiguradas de los dos, conprendía la engorrosa situación que se volvía grave.Atemorizada quiso esconderse en el dormitorio pero no alcanzó a cerrar la puerta...
Los dos persequidores entraron a la habitació,y al ver la mujer bajo las cobijas,sacaron sus armas,dispararon varios tiros,y luego tanquilamente se acostaron al lado del cadáver y se durmieron plácidamente.

¡Ya no había un tercero endiscordia!