Y esta noche que se va hundiendo en el silencio de la calle triste, con su redonda luna, con su ropon humilde.

Esta noche ya no me pertenece porque todo se ha marchado con als sombras, el rastro del amor que ya no vuelve y tu curpo que se va como las hojas.

Y aqui estoy yo, sentada y sola, con las manos cansadas y la voz quebrada, los ojos llorosos y la palabra brotando de la lengua, recorriendome todo, tomando vida para silenciar mi muerte. A veces siento que vuelve a invadirme la nostalgia por lo que tuve, por lo que vivií y que hoy solo es un recuerdo que empieza a perderse, como tu voz que solo existe en un presente al que ya no pertenezco.

Y me cobijo en las sombras de la noche, en la mañana me pongo el vestido de paciencia con el sombrero de fortaleza para tapar mi cara y continuar mi marcha