Nació en una noche donde las estrellas no cesaban de titilar.La luna contemplaba su exótica apariencia y se convirtió en su mejor amiga.

Este ser desconocía su identidad. Lo único que sabía era que vivía en un desierto y hasta donde sus sentidos podían llegar, se hallaba sola en aquel arenoso espacio.

Una noche, la soledad la invadió y llenó de tristeza su alma. Estaba cansada de que su existencia fuera un misterio; pero a la vez temía lo que pudiera pasar después de conocer la verdad.
Aún asi, se dirigió a la luna que era la única que podía responder sinceramete a sus dudas. Y así preguntó: ¿Puedes decirme quién soy? y si es asi,...dime cuál es mi realidad y el destino que me espera.

La luna respondió: Sé quien eres, y sé cual es tu realidad. Pero no puedo decirte nada sobre tu destino; porque aunque conozco como serán las noches venideras, también sé que de día todo puede tornarse de otro color y no tengo poder alguno para hablarte sobre eso.

Aún asi, te diré lo único que sé:
"Eres una flor que nació en medio de una noche donde las estrellas no cesaban de titilar y el desierto se dispuso a recibirte en medio de su cálido y arenoso espacio.
Pero aunque hayas nacido aquí, seguirás creciendo en un jardín invisible de grandes dimensiones. Y ni el cielo ni el infierno darán condena alguna a una tímida flor, que invada un desierto en donde el azul del sol y el amarillo del cielo sean más fuertes que la soledad que te pueda llegar a acechar o la atracción que puedas llegar a sentir".

Después de esto aquella flor nació de nuevo, dispuesta a vivir y a morir...; pero más importante , construye su destino mas allá de los límites figurados por la naturaleza y proponiéndose a ver la realidad.