Lluvia seductora

Llueve sin cesar,
momento perfecto para dos amantes,
el frío provoca una necesidad embriagadora
de estar muy juntos,
mientras solapadamente
aquel pequeño sofá se torna perfecto
a nuestro propósito,
cómplice silencioso
recibe cual si fuera un nido
nuestros titiritantes cuerpos.

El ambiente es perfecto,
La lluvia se convierte en dulce
invitación musical del deseo,
es extraño; pero mientras más frío,
más juntos y más ganas de quitarse la ropa dan.

Dos siluetas desnudas,
atraídas por un torrentede miradas,
que dan paso a una hermosa
cascada de caricias que vienen y van.

Yacen en aquel apartado lugar,
fatigados de tanto amar,
con una sonrisa sínica en sus
Labios y una lluvia seductora
para recordar.