Eras vos. Te aparecias entre un pasado de ruinas incomprensibles y un presente de catástrofes inevitables. Sí, sí, eras vos. No ya como promesa de libertad Sino asustada, abrazada a una mentira tan usada Que ya no explicaba nada. ¡Ay mi corazón tirano! Fue un sueño terrible volver a verte
Texto agregado el 02-06-2009, y leído por 257 visitantes. (6 votos)