Ella dice que estoy equivocado. Ignora mis razones, como suele hacerlo.
¿Por qué sigo entonces a su alrededor?
Es en sus ojos donde mejor reconozco el mundo que quiero crear. Su mirada es un recordatorio del por que he llegado a este punto.
Pero ella jamás me creerá.
¿Entonces por que sigue ella a mi alrededor?
Alguien toca a la puerta, abriéndola sin esperar respuesta.
Un rayo de luz se filtra entre nosotros.
-Lamento interrumpirlos, pero es hora de empezar.-
No puedo evitar sonreir ante lo sincero de su voz.
-Nos vemos luego.-
Inclina su rostro hacia mi mejilla. Sus labios sólo rozan el aire.
Tal vez lo hace de esa forma para remarcarme que esta harta del papel que le hago jugar.
Sólo en la habitación, repaso los eventos recientes en mi cabeza. Reviso los más viejos en mis anotaciones. Intento encontrar otro final que le dé algún sentido a esta historia.
Pero el único desenlace posible es al que ella le molesta, aquel dónde sólo fue una aventura temporal. Olvida que al estar ante los ojos de tantos no son sus deseos los que deben realizarse.
Yo me mantengo detrás de cámaras, dónde puedo sonreir si así me place. Y es díficil no hacerlo, viendo como otra de mis mentiras resulta mejor de lo que imaginaba.
Sé que ella seguirá actuando, por su propia conveniencia. Y sé que seguirá compartiendo su tiempo detrás de cámaras conmigo, pues para ella el sentido de esta historia aún no está escrito.