PG- Ahora que no nos oye nadie...¿Cómo fue tu primer beso?...
- ¡Uuuuf!..Tenía yo unos 11 añitos; se llamaba Maravillas y fue ella quien me lo dio. Pasé mucha vergüenza.
PG- ¿Vergüenza?...¿tu?...Pues si que has cambiado, macho. Ahora tienes más morro que una piara de cerdos.
- Ya estás exagerando. Es verdad que, en un momento dado, decidí desprenderme de la vergüenza.
PG- La vergüenza es un lastre que coarta la personalidad original del sujeto y le impide disfrutar de sensaciones y experiencias irrepetibles.
- Pero no todo el mundo puede prescindir de ella.
PG- Cierto. Hay veces que se confunde la timidez con la vergüenza y en realidad, la vergüenza es una consecuencia de la timidez. Solo los humanos de personalidad fuerte y definida tienen potestad para perder la vergüenza. Algunos, en cambio, sienten “vergüenza ajena”...¡es la hostia!. Algo parecido ocurre con el sentido del ridículo. El ridículo es como la belleza..., está en los ojos del que observa.
- Si, pero los sinvergüenzas no tienen buen predicamento en ésta sociedad.
PG- Los humanos confunden la falta de vergüenza con la mala educación y la grosería. Como casi siempre..., la confusión de las definiciones.
- En mi pueblo decían: “El que tiene vergüenza ni come ni almuerza”.
PG- La filosofía rural es la más empíricamente verdadera..., de dónde yo provengo, claro. Los de la polis lo desvirtúan todo. Sus contrastes son esperpénticos y las prioridades descabaladas.
- Son distintas formas de ver las realidades, los conceptos...
PG- Pero es la misma cultura, el mismo país. Si en unos kilómetros a la redonda existen esos desencuentros..., ya me contarás.
- La variedad es enriquecedora.
PG- Eso pensaban los de la Torre de Babel y acabaron como el rosario de la Aurora. Creo que estáis repitiendo la Historia, una y otra vez. Sois incapaces de analizar y asumir los errores, para aprender de ellos y modificar conductas. No existe inteligencia peor desaprovechada. En serio, no se de que presumís..., para eso no tenéis vergüenza.
- Tu no puedes comprender a los humanos. Tu no tienes vergüenza, por que no sabes lo que es..., como tantas cosas. Te crees muy listo y solo eres un puto grillo incordiante, con un desbarre verbal alucinante.
PG- Si, si, pero...¿a que jode?.
- Me la trae al pairo..., por un oído me entra y por otro me sale.
PG- Cri...cri...cri...