Una playa... arena blanda, conchas que se escapan hacia el mar. Algas...un pez espada. Una novia amarga llora su pesar. Dos lágrimas, sal en llamas, viajan en el viento buscando su lugar. Seda blanca, bella danza, provoca en el viento ansias de volar. Llora la novia vestida de engaño su pobre latido parece cesar. Una amapola sobre sus labios. Un cuento de hadas le otorga la paz. Mirada confusa, semblante sereno, oculto en la bruma del crudo disfraz. Observa la vida como pasa rauda sin dejarnos a veces momentos que amar.
Texto agregado el 23-05-2009, y leído por 170 visitantes. (1 voto)