...DE LA SERIE FANTASÍAS DOMÉSTICAS.

DIARIO DE UN CEPILLO

Al nuevo, lo conocí apenas esta mañana, de cuerpo fino, mango ergonómico y colores vivos, un cepillo seguro de sí mismo con las cerdas firmes y limpias, no como las mías.

Esta mañana no trabaje, me remplazaron con el cepillo nuevo, confieso que sentí alivio ya no aguantaba más maltratos, a pesar de que trabajaba sólo dos turnos al día, estaba harto de tanta crema y tanto mugre.

Ahora en plena jubilación me siento demasiado viejo como para disfrutarla, me quede con las ganas de ver el mundo de salir de este baño, recorrer la sala, la cocina y por q no el jardín. Mis sueños son simples y merecía una mejor vida por mis servicios. Soy un cepillo viejo que trabajo más de lo debido con los hilos gastados y la piel torcida, a penas y me sostengo en pie.

Estoy a tiempo de escapar, pero mi cuerpo inerte nunca me ha respondido, pronto vendrán por mi me meterán a una bolsa y terminare en el mundo de lo inútil.


Aun recuerdo el día que me compraron. –Este!!!, este ¡!!! si papi por fa, el de muñequitos- dijo mi dueño agarrándome con fuerza.

Luego el paseo a casa, el penúltimo paseo de mi vida, la mejor parte fue la del carrito de mercado donde vi todos los productos que por tanto tiempo me acompañaron, no cabía en mi empaque de la dicha, después me pasaron a una bolsa blanca aunque no fuè muy grato si fué emocionante pues desde la fabrica no había salido del súper, y por unos segundos sentí brisa aunque era la que rebotaba en la bolsa . En cuestión de minutos llegue a casa y salí de mi empaque, del que nunca debí salir.

Estoy seguro que mi próximo viaje será en una bolsa negra, todo lo viejo y oloroso va empacado en bolsas oscuras y de ahí directo al infierno, el mundo de lo inútil; donde nadie se distingue. Creo que la vida nos dura mientras le somos útiles a alguien, el resto de días son solo eso bolsas oscuras llenas de tiempo vacío de recuerdos y de sueños.

Ahora me despido por que hay viene mi dueño.