EDAD.






Edad...
recuerdo tu piel secreta y desnuda
cuando me escondía detrás de tus atuendos
dejaste tus labios derramados
en un cuerpo incógnito
que huyó a cumplir sentencia.

El tiempo que perduró tus ojos,
recuerda mi memoria
cómo a mis marcas más sagradas
te sigo amando aunque estés ausente.

Edad...
hoy tus manos
tienen un encuentro con la desesperanza
porque tarde tus ojos brillaron,
contemplando mi infinito,

yo caminaba con pies de plomo,
mi corazón desconocía el destino
del hacedor de tus cabellos blancos.

Los años van exterminando las altas montañas
derribaron la belleza
aun siendo seducidas,
cayeron del cielo piedras.

Observo tu rostro
tiene la forma de las aves,
intentas regresar y sumergirte en el agua,
tienes la sed del adolescente
aquel que transformo los misterios de tu juventud.

Edad...
ahora eres hermoso y perfecto
te han esculpido en las alturas
porque en la tierra
fueron las voces de los hombres
los que aclamaron tu cruel belleza.

Ahora intentas regresar
bajar por el camino del adolescente que te hizo hablar.