Las historias siempre acaban bien


Hace mucho ya
Nadie en vida puede contarlo
Ni los muertos han de explicarlo
En un reino celestial
Nació pequeña aunque con cara angelical
Hija de rey y reina difuntos
Carmi fue su nombre
Pueblo entero y conjunto
Observa al infante
Cuyos ojos luz vierte
Hombre malvado de mente
Al infante coge y en su castillo lo mete
El pueblo furioso lo rescatan
Y al hombre en su torre matan
En su último aliento él dijo:
“Antes de que pueda de la vida disfrutar
Con estas manos me la voy a llevar”
Todos, por loco lo tomaron
Y de él en seguida se olvidaron
Los años para todos pasaron
Unos fallecieron, otros envejecieron
Niña cuya cara cambió
De su niñez de desprendió
Reina de reyes
La más feliz del reino
La más hermosa de todas
Savia abuela fue la que recibió
La avisó de la terrible profecía
En la cual las crueles palabras decía
La reina importancia no mostró
“en fantasmas yo no creo
Solo creo en lo que veo”
Oscura noche en el reino aparece
Y la joven reina en la cama se adormece
De repente un ser encapuchado resurge
Al día siguiente su cuerpo inerte encontraron
Junto a ella cinco cuervos que en ella posaron
¡Pobre mujer!
La hermosa piel
Mucho mejor que la miel…
Todos lloraron
Muchos, terribles días pasaron
De esto hace mucho ya
Nadie en vida puede explicarlo
Ni los muertos han de contarlo