VIVA PIZARRO
La tarde en que no recuerdo la fecha pero si la hora, para ser precisos las cuatro de un día que nunca olvidare. El día en que mataron a Pizarro. Ese día, yo me encontraba con 11 años en un salón de un colegio privado en el norte de la ciudad, Pilar nuestra profesora de turno, decidió no hacer clase, nos reunió y empezó a llorar y a gritar con rabia, arremetió contra el país y sus dirigentes, abrió las conciencias colectivas de nosotros, impúberes capitalistas del tercer mundo, nos abrió los ojos haciéndonos ver la vida, la verdad de la vida es su forma mas cruel y real, con rabia, con hijueputazos, alrededor de una hora desplegando toda su visión del mundo en nosotros y un compañero empezó a sollozar, y otro y otro, luego vino el llanto, y al final en una histeria colectiva de 40 cagoncitos coligados, sin conciencia política ni nada, y todos lloramos la muerte de Pizarro. ¡Muchos hijueputas! decíamos y las lagrimitas se nos iban escurriendo mientras salíamos a la ruta y a que nos recogiera la empleadita en el paradero y le entregábamos la maleta, para que la cargara y sírvame rapidito el almuerzo para luego correr a decirle a mi padre lo emocionante del día de hoy, y que lloramos y todo.
FIN