No entendía nada de lo que decían en la radio. Era algo de un golpe, de que los comunistas, que los mataron, que Pinochet, que los aviones. Que lindos eran los aviones cuando pasaban sobre la casa, mientras le decía a mamá. – ¡Mira, Mira!, Que bonitos-. Ella sólo se limitaba a sentarse y rezar. Yo creo que rezaba para que no chocaran, ya que eran muy lindos.

En la radio: que incendiaron la moneda, que cayó Allende, que los está matando a todos, que los tanques, que los soldados, que Chile cambiará, que la política del país. Yo en realidad no entiendo de política. Sólo recuerdo a papa, que reclamaba toda la fila del pan, !Que los milicos nos esconden las cosas!, ¡Que la escasez es por los milicos!, ¡Que viva la unidad popular!, ¡QUE VIVA ALLENDE!, ¡QUE VIVA FIDEL!, ¡QUE VIVA CHE GUEVARA!, !QUE VIVA VICTOR JARA!. Así podía estar todo el día. Yo no entendía nada. Solo sabía que me aburrían las colas de los alimentos. Mi mamá un día me dijo: - lo que pasa es que para joder al gobierno, los malos del otro lado, escondían las cosas, así la gente creía que era culpa de los buenos. ¿Me entiendes?-. En realidad no entendía nada.

En la radio: que ya murió, que ya no queda nadie, que los milicos ya se tomaron la moneda, que se van todos presos, que la política del país, que Allende se mató, que los milicos celebran. Realmente me dio pena cuando murió Allende, en realidad no entiendo mucho de eso, pero el hombre hablaba tan lindo. Siempre apoyaba al pueblo, y como yo sé que soy del pueblo, del pueblo de Chile, entonces era bueno. No entiendo nada. La iglesia dice: Ayuden a los pobres. Los de derecha (no entiendo por que se llaman así, yo soy diestro, pero no sé que tiene que ver eso en política) dicen que apoyan a la iglesia, entonces quiere decir que apoyan lo que dice la Iglesia, pero no apoyan al señor Allende que lo único que hace es ayudar a los pobres. Bueno es política y yo no entiendo de política. En la radio: que ya no queda nadie, que los milicos apresan a los comunistas come guaguas. ¿Come guaguas?, Mi papá es comunista, pero él come porotos, lentejas, sopaipillas. Recuerdo las sopaipillas, que ricas le quedaban a mi abuela. Eran años tan lindos, que la mesa llena, que rica la comida, que viva Allende, que este año las elecciones las gana el pueblo, que viva el comunismo, abajo los yanquis opresores. “Los Yanquis”, yo creo que son inteligentes, ellos han inventado casi todo - ¡Cállate!- me decía mamá cuando hablaba de ellos- Es cierto han inventado hartas cosas, pero todo es por que tienen la plata que le robaron a todo el mundo, por eso pueden preocuparse de eso. ¿Entiendes? - Igual creo que son inteligentes.

En la radio: que el nacional esta lleno, que los torturan, que los matan, que la política del país, que Víctor Jara esta preso. “Víctor Jara”, encuentro que canta tan lindo. Recuerdo a mi papá con la guitarra, lo imitaba tan bonito, decía que la tierra es del pueblo, que los niños pobres, que la gente de campo es la que mueve al país. Creo que era muy inteligente, además todo el mundo lo quería, con decir que hasta en Argentina y Francia lo escuchaban. En la radio: Que a Víctor Jara lo encuentran muerto entre un montón de cadáveres, pobrecito. – No importa, decía mi papá, su música seguirá por siempre siendo la canción del pueblo- y la ponía en la radio, en la noche, pero muy despacio. Yo creo que era porque a los milicos no les gustaba esa música, si alguien la escuchaba, se lo llevaban al estadio nacional (supongo que para debatir los temas) . Que tontos, si eran tan bonitas. Bueno, cada uno con su tema.

En la radio: Que las cosas empeoran que apresan a más gente, que los matan, que la política. Yo no sé de política, pero no entiendo como hay gente que mata a otra ya que esa otra piensa en otra forma de política. Creo que es una tontera. Yo no sé de política, pero sé que los milicos se tomaron muy en serio esto de la política, yo creo que no vale la pena que los chilenos se maten por cosas tan tontas. Que si quieren el poder, que se lo lleven – le decía a mi papá- ¿Para que tiene que morir gente?. Ahora me caen mal los milicos. Es como si matará al Felipe, por que a él no le gustan los partidos de fútbol. Yo creo que están mal. En realidad debe ser que estoy muy chico para entender bien la política. Mejor no pienso más en ello. – ¿Mamá, Mamá? ¿ Por qué no ha llegado aún mi papá? -. - No te preocupes Jorge, al papá se lo llevaron para atender cosas de la política-. Me decía mientras una lágrima corría despacio por su mejilla.