Breve reflexión.

Mucho se ha escrito sobre Edgar Allan Poe (1809-1849), sobre su vida tormentosa y su trágico final. Él fue un escritor genial, incomprendido en su tiempo, enfermo de alcoholismo, siempre inconforme con su vida, que paradójicamente esta inconformidad lo llevó a escribir su obra tan admirada. Poe es uno de mis escritores favoritos tanto como narrador como poeta, siendo su poesía: El cuervo, una de las más conocidas y de la que se ha escrito muchas interpretaciones y explicaciones, sin embargo a riesgo de repetir lo que ya se ha dicho, quisiera recalcar el fondo metafísico de este poema.
Hay dos pistas que el mismo poema nos da: nevermore (nunca más) que le contesta el cuervo al narrador, cuando le pregunta por su amada Elinor, que joven ha fallecido. La otra pista es cuando el cuervo se posa sobre el busto de la sabiduría representada por Palas Atenea.
Estas dos pistas nos dicen: que el narrador está desesperado por la pérdida de su amada, en el caso de Poe cuando escribió el poema tenía a su joven esposa Virginia enferma de tuberculosis y murió al poco tiempo, cuando quiere encontrarla después de muerta en el paraíso, el malévolo cuervo (que para mí representa la duda) le responde nunca más. ¿Para qué sirve pues, el conocimiento? Y el mismo, en el poema da a entender: para nada sirve.
Aquí esta el meollo de mi reflexión, Poe presentía que después de la muerte lo que existe es la nada, que el paraíso y la otra vida no es más que un bello sueño del hombre que desea la inmortalidad. Su desesperación en el poema es que el joven narrador ha perdido para siempre a la que tanto amó y que su vida entonces ya no tiene sentido. Eso es lo terrible del poema y lo que mueve el tapete a todos sus lectores: la sombra de la duda en la eternidad.

Este poema se puede fácilmente encontrar en internet tanto en español como en inglés.