¡Y siempre siento la tristeza! ¡Y siempre ansío lo imposible! Sin embargo, mi pereza que no huyo de ella, insostenible situación en la que vivo. ¿Puede solucionarse el problema? ¿Puedo seguir como si nada? Sin la menor estratagema, sin pasión que mi alma invada creo que igual vivo. Pero es tiempo de serenarse, de mirar adelante, y bravo caminar entre los cardos, mirar al futuro siempre admirable, y dar gracias por seguir vivo.
Texto agregado el 01-04-2009, y leído por 116 visitantes. (1 voto)