Nuevos aires
Lo que te llama con mi ausencia
Lo que desprendes en los aires más áridos
De la risa que brota sobre el cielo

Tus parpados azules
Soslayan la penumbra de la soledad mortuoria
Tu voz inunda las vertientes de la felicidad en tus abrazos delineados en tu sonrisa…

Playa inhóspita
Tierra fértil
Manantial de vida adosado a la cornisa de tu vientre
Burbuja ascendente de majestuosidad inacabable

Una pradera gira sus caderas
Pronuncia tu nombre
En los delicados vientos de la noche
En la frondosa dimensión de tu mirada
La cual diluye el humedal de tristezas
Esparce la calidez de tus movimientos
Y renace en el alba
De la melodía
De mi corazón relampagueante
Y sus puntadas que remarcan la soledad del destino
En la esfera del matiz social-criminal
Desdibujado sobre piedra colaterales
Sobre la mentira impuesta en nuestros ojos escarpados