Hermosa mujer, cuyos ojos son fríos y oscuros, doncella que adoro en la oscuridad de la noche, mírame y no me dejes morir.
Era una noche fría y demasiado sola; yo vi una sombra que pasaba en medio de la obscuridad, y de la neblina, corrí para ver quien era y así saber si eras tu, pero no alcance a llegar pues en ese momento mi cuerpo cayo al suelo ensangrentado y sin fuerzas, en ese momento vi el rostro de aquella sombra, en ese momento mis ojos se cerraron para ir a un lugar lleno de encrucijadas y errores; llegue y no veía nada, sonreí pues realmente todo me parecía una locura, me encontraba en un lugar lleno de oscuridad y luz a la vez, realmente no entendía nada, sólo sabia que mi existencia en un mundo que para mi era real había terminado, para vivir en otro mundo que no conozco y no se si lo llegare a conocer. Me sentía preocupado por no saber que hacer y que camino tomar, di un grito de angustia; en ese momento a lo lejos vi una sombra que se acercaba a mi, sombra que empezó a tomar forma cada vez que se acercaba, hasta que logre reconocer su rostro, y quede sorprendido era el mismo rostro que había visto antes de llegar a este lugar, era el rostro de aquella mujer que podría hacer que yo enloqueciera con su mirada, con sus palabras, en ese momento ella me dijo que yo debía de salir de allí, que yo…, en ese momento ella desapareció y yo abrí los ojos y a mi lado se encontraba ella, con su cuerpo muerto, pues esa noche a mi me iban a asesinar y ella lo sabia y antes de que la bala atravesara mi corazón ella corrió hacia mi, creyendo que por ser ella inmortal no moriría, pero ella no sabia que yo también era inmortal y que la bala era para matarme a mi, y no ha un ser humano; llore y cada lagrima que recorría por mi rostro enjuagaba sus hermoso labios, y al estar ahí pronuncie las siguientes palabras:
Doncella de la oscuridad, amada de mi corazón, infinita presencia, no dejes que este corazón palpite, llévame contigo, no me dejes en sufrimiento, no lo hagas por favor, obscuridad es mi vida pero sin ti mi vida no es obscura es maldita, es despreciable, adorable mujer, dueña de la noche, dueña de mi ser.
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